Ángel, al final de la prueba, sonrió, aplaudió y elevo sus manos en señal de felicidad y agradecimiento porque el público asistente al coliseo de gimnasia lo despidió con una gran ovación.
Al bajar de la zona de competencia se fundió en un abrazo con su entrenador Jairo Ruiz, quien lo ha formado desde que tenía cinco años, y se convirtió en un padre para el nacido en Cúcuta.
Esta rutina le permitió al cucuteño en ser el primer colombiano en lograr una medalla en la gimnasia olímpica, recordando que, en 2023, ya había sido el primer nacional en ganar medallas en un Mundial de gimnasia.
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Ángel ganó las dos primeras medallas de oro en un Mundial (suelo y paralelas) en la competencia desarrollada en Antalya, Turquía.
Ese año también logró dos bronces en la prueba de barras paralelas y barra fija en la Copa Mundo, en Bakú, Azerbaiyán.
En 2024 también se hizo presente en el podio mundial con un bronce en la Copa del Mundo de El Cairo, Egipto.
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