Sentarse a disfrutar una tarde de tragos y buena música se convirtió en un ataque a puños y patadas para Alejandra Cruz Quiñonez, una mujer de Cúcuta que reclama justicia porque a pesar de que denunció a su agresor, no ha visto resultados por parte de la Fiscalía y de la Policía.

La mujer fue brutalmente agredida la noche del sábado 2 de marzo, por un hombre que ella misma identificó como José Peñaloza Peñaranda, conocido como Coqui, quien es un exjugador de fútbol sala y quien integró una temporada en un reconocido equipo aficionado de la ciudad.

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Cincuenta días después, este hombre hasta el momento, no ha sido requerido por las autoridades, al parecer, porque huyó de la ciudad.

“A los días de la agresión un investigador del caso me buscó para mostrarme una fotografía para que confirmara o descartara si era él y al verlo yo le aseguré que sí era él. Lo reconocí de inmediato y enseguida supe su nombre”, dijo Alejandra.

La agresión

El caso de Alejandra se hizo viral en redes sociales y hasta captó la atención del mismo alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, quien por teléfono le prometió ayudarla, pero hasta la fecha, todo ha quedado sin acciones.

El establecimiento comercial dónde ocurrió el ataque fue sancionado con un cierre de tres días. Foto La Opinión

La magnitud de lo ocurrido escaló el repudió de la ciudad y la región porque la agresión de la que fue víctima esta mujer obedeció a un absurdo apodo que le dieron a la mascota con la que llegó Peñaloza, el presunto victimario.

“Yo nunca llamé al perro de esa manera, fue otra chica que se acercó a la barra y le tocó la cabeza al perrito y le dijo ‘Firulais’ eso fue lo que desató la rabia del hombre. Él se ofendió muchísimo y por eso la agarró conmigo y mi prima, las dos que estábamos sentadas junto a ellos”, dijo la mujer.

Alejandra recuerda que luego del apodo a la mascota, que realmente se llama Max, los mismos compañeros con los que estaba Peñaloza fueron quienes ayudaron a ‘incendiar’ todo.

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Ella contó que oía como se le burlaban de él y de la novia por el apodo a lo que Peñaloza contestaba con groserías. Hasta que llegó el ataque.

“De un momento a otro me doy cuenta que nos está insultando es a nosotras, entonces le digo a mi prima: ‘marica, es con nosotras’ y ahí es cuando los volteo a mirar y veo al tipo que se levanta y se viene. Yo me pongo de pie y lo encaró y le pregunto ‘¿me va a pegar o qué? y ya lo demás lo vieron todo en el video”, dijo Alejandra.

La mujer sufrió agresión en la cara, cuello y piernas. Peñaloza y su novia se fueron contra ella y su prima recibió un golpe en la frente.

La mujer acudió a un centro de salud y le dieron 20 días de incapacidad. Mientras que su agresor huyó de inmediato, tanto, que dejó abandonado el vehículo en que llegó.

Dicho automotor fue recogido por Ruber Bedoya, el actual capitán del equipo Cúcuta Futsal, a quien llamaron para que hiciera el favor. Y quien aclaró que no tenía nada que ver con la agresión.

Para el domingo, la familia de Alejandra, tuvo una visita que catalogaron como intimidante, pues algunos familiares del agresor llegaron a la vivienda.

“Fueron a la casa de mi familia y los agredieron verbalmente. Porque ellos dejaron abandonado el carro no sé dónde y apareció averiado. Llegaron a decir que mi familia era de vándalos. Que no teníamos que poner denuncia, que ellos eran de Sardinata y que tenían un respaldo fuerte en ese lugar”, dijo Alejandra.

Decepcionada de la justicia

Aunque el proceso está al tanto de la Policía y la Fiscalía, Alejandra no siente respaldo.

“No hay orden de captura porque según la fiscal lo que me ocurrió no da para eso. O sea, tienen que matarlo a uno para que se pase algo. Entonces me pregunto, ¿tenían que haberme matado? Yo estaba bien. Mi vida marchaba bien y de repente un tipo porque quiso, porque se le dio la gana, me golpeó y me cambió la vida totalmente”, añadió.

La mujer apenas esta recobrado su vida normal, sin embargo, el miedo se apodera de ella, no se siente segura, ni tranquila. “Solo pido que se haga justicia, que den con el paradero del tipo, que lo encuentren”, exigió.

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La secretaria de Equidad y Género de Cúcuta, Patricia Ríos Cuellar, aseguró que desde el mismo momento de la denuncia, han realizado acompañamiento de forma personal a la víctima. “Sabemos que en este momento la denuncia se encuentra en conocimiento de la Fiscalía, realizando el trámite legal establecido. Aclarando que el delito de lesiones personales como el de violencia intrafamiliar son querellables (de menor gravedad, que exigen que la persona afectada interponga una denuncia)”, dijo.

Ríos insistió en que existe una preocupación y compromiso de abordar la violencia a la mujer, especialmente, por los altos índices de violencia intrafamiliar que reportan las distintas autoridades, especialmente el Instituto Nacional de Salud y la Policía.

“Acá es importante generar unas redes de apoyo institucional, familiares y comunitarios, con estrategias psicosociales y de autoprotección, de cultura ciudadana, para que a través del trabajo articulado se pueda lograr primero el fortalecimiento de capacidades institucionales, así como el de las habilidades de las mujeres para la vida que se traduce en autoconocerse y autovalorarse”, dijo.

Y aprovechó para recordar que las mujeres que requieren más información o asesoría se pueden comunicar a la línea de la Fiscalía 0180000919748 – celular 122. Línea de orientación a mujeres víctimas de violencia: 155.

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