La indiscriminada guerra que ha golpeado tanto a la población del Catatumbo entre los grupos criminales Eln y disidencias de las Farc continúa cobrando víctimas entre ambos bandos dejando a su paso docenas de muertos y familias en luto. Ayer en Ocaña y Tibú dos homicidios volvieron a sembrar la zozobra y preocupación en la población.
Por un lado, las autoridades fueron alertadas del cuerpo sin vida de un hombre en la vereda Kilómetro 25 de Tibú, al parecer, en medio de un enfrentamiento entre ambos grupos criminales que se adelantó en ese sector, en horas de la mañana de ayer.
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En varios videos tomados por la misma comunidad, se observó al hombre desplomado en el suelo sin vida y uniformado con la indumentaria característica de la disidencia. Al cierre de esta edición, la identidad del hombre no había sido esclarecida por las autoridades.
Otro en Ocaña
En la vereda La Pradera, jurisdicción del corregimiento Agua de la Virgen de Ocaña, la tranquilidad se vio alterada al escuchar varias detonaciones de armas de fuego en la mañana de ayer.
De acuerdo al Departamento de Policía de Norte de Santander (Denor) la víctima identificada como Elkin Fabián Sanabria Alvernia, de 37 años, estaba caminando cuando sujetos desconocidos lo ultimaron. Cuando las autoridades llegaron al lugar, Elkin Sanabria ya se encontraba sin vida.
¿Presunto guerrillero?
El hombre de Elkin Sanabria era bien conocido por las autoridades de Ocaña, pues fue detenido y acusado en 2018 de ser uno de los cabecillas de finanzas de la compañía del comandante Diego del Eln.
Este hombre, que tenía el alias de Jhan Carlos, en ese momento era presuntamente el encargado de la producción y venta de la pasta base de coca en San Pablo, corregimiento de Teorama, y en el casco urbano de El Tarra.
“Sanabria fue cabecilla de una escuadra en la vereda El Perdido del municipio de San Calixto, donde combatía con un fusil y dos granadas de fragmentación”, detallaron las autoridades en su captura.
De acuerdo al reporte de inteligencia, el occiso tendría una trayectoria de más de 15 años en la organización criminal y desde el año pasado tenía un proceso judicial por concierto para delinquir agravado y rebelión.
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