Lo que debía ser una noche de celebración y entretenimiento en el barrio Villa Antigua, en Villa del Rosario, se convirtió en un episodio de terror que quedó registrado en una transmisión en vivo.
La inauguración de un billar, que incluía un torneo de pool con jugadores reconocidos, fue el escenario de un ataque a bala que dejó como saldo dos personas muertas y cuatro heridas.
El evento, planificado con meses de antelación, prometía ser una cita imperdible para los amantes de este entretenimiento. Contaba con la presencia de figuras destacadas como Gerson Martínez Boza y Kuko, dos jugadores de renombre invitados para animar la velada con sus habilidades en la mesa de pool.
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Las actividades iniciaron a las 7:00 de la noche del sábado, y durante las primeras horas, todo transcurrió en un ambiente de alegría y competencia sana. Sin embargo, cerca de las 9:30 p.m., la tranquilidad se rompió abruptamente cuando un hombre armado irrumpió en el establecimiento y abrió fuego contra los asistentes.
El pánico se apoderó del sitio en cuestión de segundos. Entre gritos y confusión, varias personas intentaron resguardarse detrás de las mesas de billar y otros huyeron despavoridos, mientras que seis de los presentes fueron alcanzados por los proyectiles.
El horror quedó registrado en la transmisión en vivo que se realizaba a través de una cuenta de Facebook, evidenciando el momento exacto en que se desató el caos.
El atacante, en medio de la conmoción, logró escabullirse entre la multitud y huir sin ser detenido.
A solo una cuadra del establecimiento se encontraban uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta, quienes al escuchar los disparos llegaron rápidamente al lugar. Con la urgencia del caso, ayudaron a trasladar a los heridos hasta un centro asistencial.
A pesar de los esfuerzos médicos, minutos después se confirmó la muerte de Samir Fernando Olarte Téllez, mientras que Edwin Yesid Uribe Vargas perdió la vida en el sitio del ataque.
Por otro lado, las personas heridas fueron identificadas como Felipe Alfonso Osorio Velásquez, Jesús Ariel Suárez Suárez, Jimmy Ramírez Martínez y Edinson Lascarro Carrillo.
El área del crimen fue asegurada por los uniformados, permitiendo que la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) realizara la inspección técnica y el levantamiento de los cadáveres.
¿Un asistente más?
De acuerdo con información obtenida por este medio, el sicario logró ingresar al establecimiento sin levantar sospechas, haciéndose pasar por un asistente más del evento.
Apenas pasaron quince minutos desde su ingreso cuando sacó un arma de fuego y comenzó a disparar indiscriminadamente contra varios hombres en el lugar.
Tras perpetrar el ataque, el agresor aprovechó el desorden y el miedo colectivo para escapar sin dejar rastro. Aunque las autoridades desplegaron operativos, hasta el momento no se han reportado capturas relacionadas con el caso.
Según las primeras investigaciones, Samir Fernando Olarte Téllez recibió la mayor cantidad de impactos, lo que hace pensar a las autoridades que él era el objetivo principal del ataque.
Dos posibles hipótesis
En torno a este hecho que enlutó a dos familias y que reavivó las preocupaciones por la seguridad, han surgido dos versiones que podrían explicar lo sucedido.
La primera apunta a que el ataque tenía como blanco a Samir Fernando, quien se dedicaba al cambio de divisas. Aunque la víctima no tenía antecedentes, se conoció que también prestaba dinero y que recientemente mencionó que le adeudaban una suma considerable.
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La segunda hipótesis está relacionada con una posible extorsión. Fuentes cercanas al caso revelaron que el dueño del billar estaba siendo víctima de extorsionistas, quienes le exigían un pago y lo amenazaron con represalias.
Ambas versiones están siendo analizadas por las autoridades, que trabajan para determinar si el ataque fue un tema de deudas o una represalia más amplia.
Un hombre trabajador
Los familiares de ‘Sami’, como era conocido, aún no pueden asimilar lo ocurrido.
El sábado en la noche recibieron una llamada que cambió sus vidas. Aproximadamente a las 10:30 p.m., alguien les informó que su ser querido aparecía en videos que circulaban por redes sociales.
El dolor y la impotencia invadieron a la familia, que ahora solo pide justicia y que las autoridades den con los responsables.
“Él era un hombre muy trabajador, desde pequeño se metió al negocio del cambio de divisas y siempre fue muy dedicado”, expresó una familiar.
Samir había regresado de España, donde recibía un tratamiento médico contra el cáncer de ganglios linfáticos.
“Él tenía fe en que esta vez sí funcionaría”, relató su allegada.
Samir dejó dos hijos huérfanos: un niño de cinco años y una adolescente de 15. Trágicamente, el día de su muerte coincidió con el cumpleaños de su hijo menor.
Más allá de su trabajo, Samir disfrutaba del deporte, los viajes y los paseos. Su pasión por el fútbol lo llevaba a seguir cada partido de la Selección Colombia.
La familia, en medio del dolor, denuncia el alarmante nivel de inseguridad en la región.
“Aquí ya no se puede salir. Matan a la gente todos los días solo por estar en el lugar equivocado”, concluyó la familiar.
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