La voz de uno de los testigos del crimen más reciente que se originó en La Parada de Villa del Rosario, aún tenía los rastros de nerviosismo en medio del shock que dejó el indiscriminado ataque a bala.
Las miradas entre comerciantes y clientes de los establecimientos de venta de licor que están ubicados a pocos metros del puente internacional Simón Bolívar, reflejaban impresión y al mismo tiempo alegría y certeza de haber sobrevivido al hecho, sin ser víctimas de una bala perdida.
El pistolero accionó el arma en once oportunidades, causándole la muerte a Jonathan Antonio Dávila Villamizar, de 38 años, quien recibió varios impactos en la cabeza. Mientras que el cartagenero Roger Chico Acevedo resultó herido y se recupera de las lesiones en un centro asistencial.
Los videos de las cámaras de seguridad ubicadas en los negocios donde ocurrió el ataque, serán pieza fundamental en las pesquisas que adelantan los investigadores de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho), en la búsqueda de identificar a los autores del asesinato.
Precisamente, cuando un hombre armado se bajó de una motocicleta marca Suzuki DR 650, en la que lo esperaba su cómplice, todo se transformó en momentos de pánico entre los clientes los establecimientos y los comerciantes, al escuchar las repetidas detonaciones de los disparos.
“Yo me estaba tomando una cerveza con mi esposa cuando empezamos a escuchar esos disparos que parecía como pólvora y de repente vimos caer a los dos señores, por lo que buscamos donde escondernos”, recordó un testigo.
Según conocieron las autoridades, el agresor se le acercó por la espalda a Dávila Villamizar y le empezó a disparar sin piedad, hasta verlo caer agonizante.
En medio del ataque también fue impactado Roger Acevedo, aunque al parecer, los dos hombres no tenían ninguna relación cercana.
Sin embargo, en la mesa donde estaba sentada la víctima, quedaron cuatro vasos llenos de cerveza.
Cuando el pistolero se percató de haber cumplido su objetivo, se regresó corriendo hacia donde lo esperaba su cómplice y huyeron de la escena del crimen, por la misma vía por donde llegaron.
Aunque las víctimas fueron trasladadas al hospital del municipio histórico, Dávila finalmente murió.
“En La Parada y Villa del Rosario esto es muy común y parece que nadie lo podrá controlar”, aseguró un habitante de esta zona del área metropolitana de Cúcuta.
En La Uchema
La noche del viernes 14 de mayo otro hecho violento estremeció a gran parte de Villa del Rosario, porque miembros del Ejército de Liberación Nacional (Eln) marcaron nuevamente su huella mortal en la vereda La Uchema, asesinando a dos hombres en este sector rural.
Las víctimas aparecieron con más de tres disparos en su cuerpo, ambos los distanciaban ocho pasos. Los dos quedaron boca arriba, portando botas pantaneras negras.
Dos familiares de una de las víctimas la identificaron como Alberto Rodríguez Alemán. El otro hombre aún no ha sido identificado.