Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Judicial
¿Crimen por una deuda de gallos? Conozca los detalles de un asesinato en El Zulia
“Pero, espere mano, qué pasa, qué pasa”, alcanzó a decirle Miguel Peñaranda a su victimario, quien lo mató con una arma con silenciador.
Authored by
Image
La opinión
La Opinión
Domingo, 16 de Marzo de 2025

En la avenida 6 del barrio Pueblo Nuevo del municipio de El Zulia fue asesinado Miguel Peñaranda, al parecer, con un arma de fuego con silenciador.

El crimen ocurrió a plena luz del día, en un sector transitado de esta población del área metropolitana de Cúcuta, generando zozobra entre los habitantes.

La víctima, un hombre reconocido en la comunidad por su carácter tranquilo y trabajador, fue atacada sin previo aviso dentro de la vivienda donde residía con su compañera sentimental.


Le puede interesar: Tras las rejas hombre señalado de violar a su hija en zona rural de Sardinata y El Zulia


El hecho se presentó a mediodía de ayer cuando Peñaranda se encontraba en su hogar. De manera repentina, dos hombres que se movilizaban en una motocicleta llegaron al sitio. Uno de ellos descendió del vehículo y se dirigió directamente a la entrada de la casa, donde la víctima lo habría enfrentado.

En medio de un aparente forcejeo, testigos aseguran haber escuchado las últimas palabras de Peñaranda: “Pero espere mano, qué pasa, qué pasa”, habría dicho, segundos antes de recibir los disparos que le quitaron la vida.

El sicario, tras ejecutar el ataque, corrió de inmediato hasta la motocicleta en la que su cómplice lo esperaba y emprendieron la huida con rumbo desconocido. Mientras tanto, algunos vecinos se acercaron al lugar para auxiliar a la víctima, pero al notar la gravedad de las heridas confirmaron que ya no había nada por hacer. Miguel Peñaranda había muerto en el acto.

 

Consternación en la comunidad

La noticia del homicidio se difundió rápidamente en la zona, atrayendo la atención de decenas de curiosos. Una veintena de personas se congregó alrededor de la vivienda, impactadas por lo sucedido. Para muchos, era difícil creer que un hombre humilde y dedicado a su trabajo se convirtiera en una nueva víctima de la violencia que azota a El Zulia.

Minutos después, uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta llegaron al sitio para acordonar la escena del crimen y adelantar los procedimientos de inspección y levantamiento del cadáver. Agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) realizaron la recolección de evidencias y testimonios de testigos que puedan ayudar a esclarecer el crimen.

 

No tenía problemas con nadie

Familiares y allegados de la víctima aseguraron que Miguel Peñaranda era una persona pacífica que no tenía conflictos con nadie. Lo describieron como un hombre noble, amable y trabajador, con un gran sentido del humor y apasionado por el fútbol.

Peñaranda trabajaba en unos tejares, pero también se involucraba en actividades comerciales de su familia, quienes son conocidos en El Zulia por sus diversos negocios, entre ellos una gallera donde se realizaban apuestas.


Conozca: Guerra en el Catatumbo: un militar herido en Convención y explosivos en El Tarra


Su repentina muerte ha dejado un profundo vacío entre sus seres queridos, quienes aún no comprenden las razones detrás del ataque. “Era un hombre que nunca tuvo problemas con nadie, siempre alegre y dedicado a lo suyo”, comentó un amigo cercano.

 

Las hipótesis

Las autoridades han planteado varias hipótesis en torno a este asesinato, tratando de establecer los posibles móviles del crimen.

Una de las primeras teorías sugiere que el asesinato de Peñaranda podría estar relacionado con el homicidio de Miguel Castillo Sandoval, ocurrido el pasado 9 de marzo en la misma localidad. No obstante, esta versión perdió fuerza, ya que Castillo Sandoval fue presuntamente ejecutado por el Eln por estar supuestamente involucrado en cobros extorsivos.

Otra posibilidad que se investiga es que Peñaranda se haya convertido en blanco de una venganza por negarse a pagar una ‘vacuna’ impuesta por grupos al margen de la ley. Sin embargo, hasta el momento, no hay indicios claros que respalden esta versión.

La hipótesis que ha tomado más fuerza hasta el momento está relacionada con una deuda económica. Según información extraoficial, la víctima habría quedado debiendo dinero de una apuesta en una pelea de gallos y la persona a la que no le pagó podría haber ordenado su muerte.

“Esa es la que más creemos porque de verdad que ese muchacho no se metía con nadie ni tenía problemas, seguro le quedó debiendo a quien no debía”, comentó un residente del sector.


Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Temas del Día