Efectividad máxima
El Inter asaltó el Subaru Park, donde el Union llevaba 15 partidos invicto, con un recital de efectividad al materializar sus cuatro disparos entre los tres palos.
Miami volvió a abrir muy temprano el marcador en un envío desde su campo del ucraniano Sergii Kryvtsov a la carrera de Josef Martínez, que remató cruzado fuera del alcance del arquero Andre Blake en el minuto 3.
"Estamos decepcionados por cómo empezó el partido, ese primer gol fue evitable", lamentó Jim Curtin, entrenador del Union.
Curtin, que había planteado un esquema cauteloso con tres centrales, avanzó sus filas para alimentar una ofensiva que echó en falta a su máximo goleador, el argentino Julián Carranza, baja por lesión.
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El húngaro Dániel Gazdag tuvo en sus botes el empate a los ocho minutos al plantarse frente al arquero Drake Callender, que hizo la primera de sus atajadas salvadoras.
Messi aprovechó entonces los espacios concedidos por los locales para firmar un gol de museo. Martínez recibió la pelota en medio campo y habilitó al astro argentino que, al ver cómo Blake retrocedía hacia su arco, lanzó un potente zurdazo desde 31 metros que sorprendió al jamaicano.
El crack de Rosario, que ha marcado en sus seis partidos con el uniforme rosa del Inter, celebró con una enorme sonrisa uno de los tantos más lejanos de su carrera.
En el 45+3, el Inter sentenció la semifinal en una asistencia del finlandés Robert Taylor a la irrupción por la banda izquierda de Jordi Alba, que anotó de disparo cruzado.
"El mejor equipo de la liga"
Tras el descanso, el Union se lanzó a por el arco rival y descontó en el 73 cuando el recién ingresado Alejandro Bedoya, de padres colombianos, remachó a la red un rebote en el área.
Las ilusiones de remontada se desvanecieron en tan solo 11 minutos cuando el mediocampista David Ruiz, de 19 años, recibió una pelota a la espalda de la zaga y cruzó la pelota a la red.
"En unas semifinales necesitas que las oportunidades caigan a tu favor", subrayó el entrenador del Union, que cree que el Inter está en camino de dominar el fútbol norteamericano.
"Tienen al mejor jugador de todos los tiempos; a Busquets, uno de los mejores centrocampistas de la historia; a Alba, que es también muy bueno, y a jóvenes en los que se han gastado mucho dinero", enumeró Curtin. "Y van a ser mejores. Sus dueños van a gastar como locos y los van a convertir en el mejor equipo de la liga".