A través de un oficio enviado por el Ministerio de Defensa, se ordenó el retiro de los uniformados de la Fuerza Pública encargado de custodiar la seguridad del los aeropuertos Simón Bolívar de Santa Marta, Camilo Daza de Cúcuta, Alfonso López de Valledupar, Almirante Padilla de Riohacha, Yarigüieis de Barracabermeja y Palonegro de Bucaramanga; todos concesionados por Aeropuertos de Oriente S.A.S
Esta situación se originó luego de que el negocio jurídico celebrado entre la Institución y la Concesión el pasado 26 de julio de 2018, dejó de producir efectos desde el pasado viernes.
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El escrito mencionó que, “la Policía Nacional se acoge a la terminación anticipada y se procede desde la fecha a efectuar los actos administrativos correspondientes a la liquidación y de esta manera el retiro de los funcionarios de policía que se encuentran en los aeropuertos vinculados en los compromisos operacionales del convenio a partir del 28 de octubre de 2022″.
Según manifestó el gerente de Aeropuertos del Oriente, Nelson Rodríguez Cruz, es un deber constitucional de la Fuerza Pública garantizar la seguridad.
“Nuestra seguridad, que es la que tiene los temas de control de las zonas interiores y todo el tema de control de acceso de pasajeros va a seguir funcionando porque eso lo realizamos nosotros, pero necesitamos el apoyo de la institucionalidad”, señaló.
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Esto dice la Policía
“El servicio de policía de carácter permanente y fijo al interior de estos aeropuertos será removido, con el ánimo de privilegiar la seguridad y vigilancia de lugares públicos y abiertos al público, en beneficio de la comunidad, donde existe una mayor afluencia de personas, que demandan una alta presencia de policías”, dijo la entidad por medio de un comunicado.
En todo caso, el servicio de policía se mantendrá en los alrededores de los aeropuertos, mediante patrullas del modelo de vigilancia comunitaria por cuadrantes y atenderá al llamado de la ciudadanía sobre hechos que ocurran dentro de los mismos, sin perjuicio a la realización de planes especiales que la Policía disponga dentro de la órbita de su competencia, como lo es la prevención del tráfico de drogas.
Ante esta decisión la Policía recalcó que las actividades que venían cumpliendo al interior de estos aeropuertos, podrán ser realizadas por compañías de vigilancia privada, como sucede en la mayoría de los aeropuertos, ya que, al ser concesionados, les corresponde cubrir las necesidades básicas de vigilancia por compañías afines a esta labor.
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