Los cucuteños afiliados al sistema de salud continúan enfrentando dificultades debido a la escasez de medicamentos. Personas con enfermedades crónicas y dolorosas afirman que no han podido acceder a medicinas para los tratamientos básicos que necesitan.
Los usuarios deben hacer largas filas solo para recibir una negativa, ya que, según las distribuidoras, los medicamentos no están disponibles. En estos casos, les entregan un pendiente y la promesa de avisarles cuando el medicamento llegue, sin embargo, esto nunca sucede, aseguran los afectados.
Los pacientes atendidos por la Nueva EPS denuncian retrasos de hasta cinco meses. En la mayoría de los casos, deben regresar a casa sin recibir los tratamientos que requieren.
“Tengo una condición respiratoria, me mandaron a usar un inhalador, además de otros medicamentos, he venido hace cuatro meses y nunca hay nada”, expresó una usuaria de Nueva EPS.
Estos medicamentos son esenciales para quienes los requieren, por lo que, ante el desabastecimiento, deben asumir por su cuenta su adquisición, aunque muchos de ellos tienen un costo muy elevado.
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Sistema de salud en Norte de Santander
En el departamento hay más de 1.7 millones de afiliados al sistema de salud, de este total un 73.7% está en régimen subsidiado, el 24.5 % en contributivo y el 1.8% restante en régimen especial y de excepción.
Las principales Empresas Prestadoras de Salud (EPS) a las que los nortesantandereanos pertenecen son Nueva EPS, Coosalud, Sanitas y Comfaoriente.
Según información procedente de la Superintendencia de Salud del departamento, se registraron en los últimos doce meses 39.428 reclamos. La entidad con mayor reclamos fue Nueva EPS con 19.628, seguida de Sanitas con 8.434 reclamos.
De igual manera la superintendencia menciona que la negación para la entrega de tecnologías en salud (medicamentos) y la falta de oportunidad en la entrega de estos, son las dos principales razones de los reclamos.
Para febrero de este año la tasa subió en un 47% en comparación con el año anterior, y solo el mes pasado se registraron 3.637 reclamos.
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Usuarios de Nueva EPS denuncian
En medio de largas esperas, incertidumbre y frustración, las personas afiliadas a Nueva EPS hacen fila en las instalaciones de Cafam, entidad responsable de la distribución de medicamentos, con la esperanza de que esta vez sí puedan obtenerlos
La Opinión habló con varios pacientes que esperaban la entrega de sus medicinas y conoció que existen retrasos de más de cuatro meses. Algunos incluso afirman que no han recibido ningún medicamento en lo que va del año.
Las principales enfermedades de las que los pacientes requieren medicamentos son diabetes, hipertensión, cáncer y enfermedades respiratorias y cardiacas.
Mi papá sufre de hipertensión, diabetes y tiene problemas cardíacos, tengo una orden de catorce medicamentos para él, solo me entregaron dos, ¿de dónde vamos a sacar los demás?, denunció una mujer a las afueras del dispensario Cafam de la avenida 0.
Una situación similar vive una paciente residente del barrio San Miguel y menciona que debe bajar caminando para que le entreguen los medicamentos.
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“Yo soy hipertensa y mi esposo tiene problemas en la columna, y a ninguno de los dos nos entregan medicamentos. Hoy tengo dos pendientes y ninguno está disponible” denunció.
Otra paciente denuncia que requiere de un tratamiento de cuatro medicamentos para el tratamiento de esquizofrenia, sin embargo, solo ha podido acceder a uno desde el mes de octubre.
“Necesito cuatro medicamentos para poder llevar una vida relativamente normal ante mi padecimiento, hoy vine nuevamente, tengo tres pendientes y no logré recibir ni uno solo”, expresó una paciente.
En los tratamientos del cáncer los pacientes no solo luchan con un tratamiento doloroso y desgastante, sino también con la dificultad en el acceso a los medicamentos que ayudan a lidiar con esos dolores, tal es el caso del pariente de una joven que esperaba en Cafam a ser atendida para reclamar medicamentos para su tío quien sufre de cáncer.
“Él requiere de dos medicamentos para los dolores producto del tratamiento que lleva, también requiere de unos parches de Buprenorfina que muy pocas veces están, adquirirlos es costoso para nosotros. Hace tres meses que no nos entregan completo los medicamentos”, denunció.
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Las entidades no responden
Para intentar conocer las causas de este desabastecimiento se contactó a las entidades Nueva EPS y Coosalud y la distribuidora Cafam, responsables de entregar los medicamentos a los usuarios de Nueva EPS, sin embargo, al cierre de esta edición no se recibió respuesta alguna.
En medio de esta crisis, los pacientes continúan enfrentando barreras para acceder a sus tratamientos, mientras las entidades responsables guardan silencio ante la creciente indignación de los afectados. A pesar de los constantes reclamos y denuncias, no se ha ofrecido una solución clara ni un plan de contingencia que garantice el suministro adecuado de los medicamentos.
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