¿Será que el alcalde Yáñez aún no despierta de su largo sueño 2020-2023? Lo anterior, porque me parece estar viéndolo por las calles, con megáfono en mano, juzgando sin dar nombres a funcionarios que han ocupado cargos en administraciones anteriores, con el adjetivo de “zurrones” aún cuando dicha palabra a pesar de estar en el Diccionario de la Real Academia Española, su significado dista bastante de lo que siempre quiso transmitir, es decir, corruptos.
Los años de la administración de “arcángeles” fueron pasando y poco se hicieron visibles escándalos no solo del pésimo comportamiento de sus alfiles principales, sino de presuntos malos manejos de recursos que perfectamente los ubica en el mismo grupo de “zurrones”, principal bandera de su campaña electoral.
Son pocas o ninguna, las obras de verdadero impacto que pueda mostrar la administración y en cambio, deja una ciudad con la malla vial en alto deterioro porque sus avances fueron tan tímidos, que muy eventualmente se veían las cuadrillas responsables de tapar huecos y de ahí, la afectación de la amortiguación de miles de vehículos de todas las edades, sin que existan pronunciamientos de agremiaciones, aspecto que se convierte en una reverencia para el burgomaestre.
Ahora, se alista para entregar a la ciudad el mayor regalazo de los últimos cuarenta años: un centro de atención ciudadana, debajo del elevado ubicado frente a la entrada principal del almacén Éxito, cuando todo parecía que sería un cafetería y ahora, está decidido a armar el punto de congestión vehicular más alto de toda la ciudad y no demora en salir con el trasnochado cuento que así funciona en Europa, porque de ser cierto, es en ese continente en donde la vías internas de la ciudad, son la prioridad de la ciudad y por lo tanto, será recordado por ser autor intelectual y material de un gasto totalmente innecesario para una ciudad que pide a gritos mejora en la movilidad, en lugar de construir, residencias flotantes para indigentes.
Alcalde Yáñez: es preferible que se limite a vigilar las obras que inició y que no creo se terminen, porque el experimento ciudadano de elegir a un empresario, fracasó totalmente, castrando la oportunidad a cientos de personas que con su esfuerzo y duro trabajo, son sobresalientes, pero que muy lamentablemente, usted dejó una traza fácil de superar por marcadas huellas de regular y baja ejecución. De verdad, ¿tiene algo para mostrar que no sea otro regalazo?