Muy reciente y ya está en librerías nuestras. “La Responsabilidad de los Intelectuales“. Chomsky es incansable y es un gurú de nuestra generación. No es nada nuevo, actualiza dos ensayos uno de nuestros días universitarios sobre la guerra de Vietnam y otro de 2011 tras la muerte de Bin Laden. Ambos giran sobre la honestidad y la verdad, denunciar las falsedades y controvertir los discursos extremos del poder y de sus contradictores; dos fundamentos de responsabilidad social de quienes escriben e informan.
Siempre en su línea de disidente, uno de los más influyentes pensadores en nuestra generación junto a Herbert Marcuse, jamás ha interrumpido su capacidad de denuncia de las suciedades del poder, la crítica incisiva a todos los sistemas sociopolíticos del planeta, especialmente de los Estados Unidos de América.
Así lo expuso en su ensayo y controversia “Réquiem por el Sueño Americano” diseccionando los diez principios de la concentración de la riqueza y del poder el objeto de la ciencia política. Los focaliza en la forma como ellos secuestran la democracia en favor de elites financieras y políticas en la democracia occidental y en las demás culturas donde imponen su influencia, en perjuicio de los pueblos que carga con sus miserias.
¿Cuál es la responsabilidad de los comunicadores de opinión y de los pensadores, para enfrentar esas atrocidades?
¿Y a quienes podemos considerar como verdaderos comunicadores y formadores de opinión, pensadores e intelectuales? Una pregunta que con sarcasmo ya se había hecho Dwight McDonald en 1945, a los pensadores e informadores que luego de la guerra despreciaban a los vencidos y exaltaban a los vencedores.
Quedarían dos posiciones. Una, la de seguir la comodidad de lo que indiquen las convenciones de las instituciones y adoptar pasivamente las estructuras de las riendas del poder, de la autoridad, del conformismo y eludir las complejidades morales e intelectuales. Otra posición es la del disentimiento racional, por la obtención del bien común: que es y ha sido la permanente posición intelectual de Noam Chomsky.
Nos produce una dolorosa nostalgia releer estos viejos ensayos, porque nos trae a la memoria los sucesos de El salvador y América Central en estos momentos de frustración del proceso de paz, utilizados por las dos extremas de Colombia, con fines perversos.
El eterno problema de los halcones y las palomas, sutilmente utilizados para justificar otros intereses despreciables y execrables.
Vale la pena la inversión en el libro de Noam Chomsky, para un buen repaso.
Adenda: ¿Cómo irá el proyecto de institucionalización del municipio de Cúcuta, el gran proyecto del señor alcalde? Bueno, el manual del DAFP le ayudará mucho para encuadernar el mamotreto.