Muy de nuestro tiempo son las fakenews, los memefakes, los IAfakes y todo lo que se ocurra a la gente para difamar, hinchar o simplemente tomar el pelo a su adversario o a quien quiera recoger el guante y se lo plante.
He rescatado cuatro noticias viejas, que ya no lo son, pero que lo pudieran ser por el sólo hecho de que tienen un tinte, por lo menos, curioso y sin las salpicaduras de la actualidad que nos aplana tanto. Son hechos reales, de los que se toma su esencia informativa y se desvirtúan con humor y otras sustancias, como se haría en un corrillo o durante el break del café. La pretensión no va más allá de que el público lector que me acompaña (escaso, por demás) se refresque con estas grageas libres de contraindicaciones y sin efectos secundarios, sobre todo si es diciembre.
1ª. Un ciudadano francés fue condenado a pagar una indemnización de 10.000 euros a su ex-esposa por "ausencia de relaciones sexuales durante varios años". (Fue en 2011, ¡cuánta plata!). Aunque el condenado argumentó problemas de salud y la acusadora no cuantificó la frecuencia deseada, el tribunal de Aix-en-Provence –ante el vacío jurídico francés– tomó la determinación basándose en “los deberes del matrimonio” incumplidos por el incumplido. En consecuencia y en días posteriores ante el mismo tribunal, se presentó una madame, regente de una casa de citas de la localidad reclamando deudas por el doble de la cifra citada y que el monsieur (muy solvente físicamente) se ha negado a pagar durante años alegando física insolvencia monetaria.
2ª. Hace diez años, científicos del Hospital Central de Leeds, Inglaterra, alertaron sobre la inminente extinción del Phthirus Pubis, insecto conocido en los bajos mundos como ladilla. El estudio concluyó que el declive en dicha población lo había causado la moda endémica de la depilación púbica humana. Ahora que la devastación forestal –entre otras ruindades– incrementa el célebre calentamiento global, preocupa que un animalito más se pierda por los efectos erosivos de unas pelvis vanidosas y calenturientas. Hoy en día, al parecer, por influencia del porno online la cosa se ha agravado al máximo, a tal punto de que un colectivo de portadores proteccionistas de la criatura, han decidido, además de mantener sus bosques pélvicos frondosos, dejar de rascarse alrededor de una semana para que la docena de huevitos de mamá ladilla y un vínculo de coexistencia de más de tres millones de años no se rompan.
3ª. Posando de turista y con reincidencia, el señor Hans Kubus, en su visita a New Zeland, fue sorprendido en 2017 por las autoridades aeroportuarias con “44 ejemplares de siete especies protegidas de lagartos” envueltos en un pequeño paquete escondido en sus calzoncillos. La detención se desarrollaba sin contratiempos hasta que –según lenguas viperinas– se sintieron unos gritos espantosos dentro del cubículo aduanero. Los bramidos eran emitidos por el traficante de nacionalidad alemana, que luchando con una agente del orden, trataba de impedir que ésta le arrancara de su cuerpo el reptil N° 45, el más grande del lote.
4ª. En mayo de 2008, en un anuncio milagroso de aquellos, una chica X visitó al especialista y este le recetó una dieta que resultó muy eficaz. En su momento pesaba 63 kilos y tres meses después alcanzó los 52 sin ningún problema. Cualquiera podría calcular que si redujo más o menos un kilo por semana, siguiendo una progresión lógica –sin lugar a dudas–miss X extinguió su último gramo en algo más de un año y se encuentra desde entonces en modo fantasma y absolutamente feliz… ¡FELIZ NAVIDAD!