Los alcaldes adscritos a la Asociación de municipios de la provincia de Ocaña, sur del Cesar y zona del Catatumbo insisten al Gobierno nacional destrabar el proceso para adecuar un sitio con mayores capacidades y ofrecer resultados operacionales en esta zona del territorio colombiano.
Una de las alternativas es utilizar el lote donado por la Gobernación de Norte de Santander donde los diputados autorizan a la Secretaría de Seguridad contratar los diseños y obras de estabilización del predio.
El alcalde de Ocaña propuso un encuentro con la Dirección Nacional de la Policía para que entreguen el aval para la construcción del Centro de Operaciones del Segundo Distrito.
“Se registra hacinamiento en las celdas, hay un conflicto armado en el territorio con repercusiones en el casco urbano que no se puede ocultar, es una zona residencial donde se requiere mayor seguridad”, agregó.
La pregunta que se hacen los habitantes de la región es si la reserva presupuestal de 30.000 millones de pesos, aún se mantiene o se debe remar nuevamente con la dirigencia política polarizada para garantizar la ejecución de la obra.
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Las condiciones están dadas, la idea es que el ministerio del Interior a través del Fondo Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana (Fonsecon) pueda apropiar esos recursos de nuevo y bajarlos, simplemente es desenredar un poco el concepto y hacer realidad las obras, indicó Cañizares.
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