En una emotiva ceremonia, la Universidad de Pamplona otorgó el título de Doctorado Honoris Causa a las pianistas Blanca Uribe y Teresa Gómez, dos de las más destacadas artistas del país.
La entrega fue realizada por el rector Ivaldo Torres, quien expresó que estas distinciones enaltecen la vida y obra de mujeres que han transformado la visión de generaciones de estudiantes a través de sus enseñanzas.
“Somos nosotros, la comunidad académica, la que gana al reconocerle a otra persona toda la trayectoria que ha podido avanzar en esta universidad, que con su presencia se convierte en un verdadero escenario de arte”, expresó el rector.
Lea aquí: ¡Dolorosa eliminación! Cúcuta Deportivo perdió ante Patriotas en Tunja y se despidió del Torneo I-2025
El rector también destacó que ambas artistas han mantenido vínculos académicos con la institución y, a partir de ahora, formarán parte del cuerpo docente del nuevo Doctorado en Arte y Cultura, un programa que buscará fortalecer la investigación en el panorama artístico.
La ceremonia fue organizada por el Consejo Superior Académico y abrió con una presentación musical a cargo de la orquesta de la Universidad, que interpretó los himnos de Colombia y del alma mater.
Originaria de Antioquia, Teresa Gómez vivió una infancia marcada por condiciones sociales adversas que moldearon su visión crítica y su sensibilidad artística. Sus padres adoptivos trabajaban en el Palacio de Bellas Artes de Medellín, lugar que fue cuna de su amor por el piano.
Infórmese: La risa de La Diabla: así operaba banda de mujeres atracadoras en Floridablanca
Aprendió a tocar en secreto durante las noches, hasta que su talento la llevó a formar parte de la Ópera de Medellín (1971–1972) y luego de la Ópera de Colombia (1975–1981). También integró compañías musicales en Polonia y ha recibido múltiples reconocimientos, como la Cruz de Boyacá, otorgada por el Gobierno Nacional por su trayectoria y su aporte a la cultura.
“Es un homenaje muy sentido y muy cercano, por eso estoy muy agradecida”, expresó entre lágrimas Teresa Gómez.
Por su parte, Blanca Uribe manifestó sentirse feliz, aunque nostálgica, al recordar que le hubiese gustado compartir este reconocimiento con sus padres, quienes la criaron en un entorno profundamente musical.
Desde los once años tocaba con la Orquesta Sinfónica de Colombia. Su talento la llevó a estudiar en Viena y en la Juilliard School de Nueva York. Más adelante, ejerció como docente en Estados Unidos, hasta que en 2003 regresó a Colombia, donde desde entonces se ha dedicado a la formación de jóvenes pianistas.
Entérese: Hombres armados explotan un cajero de Bancolombia y roban el dinero en Juan de Acosta, Atlántico
En 2013, se convirtió en la primera docente en recibir la distinción de profesora emérita de la Escuela de Administración, Finanzas e Instituto Tecnológico, por sus valiosos aportes a la institución.
“Una disciplina férrea, eso es lo que se necesita: trabajar muy duro, muy consciente y con mucho amor por lo que se hace”, destacó la artista.
Una vez recibida la distinción, las maestras ofrecieron una interpretación de la canción Brisas del Pamplonita en la biblioteca del campus principal, ante estudiantes, profesionales y docentes.
Conozca: ¿Tiene problemas con el licor?, hay manos amigas esperándolo
Al final de la noche, se realizó un emotivo concierto en el que las maestras Blanca Uribe y Teresa Gómez compartieron escenario por primera vez en Norte de Santander. Ante un público conmovido, interpretaron un repertorio exclusivamente colombiano, rindiendo homenaje al legado sonoro del país y reafirmando su compromiso con la difusión del arte nacional.
“Fue el cierre perfecto para una ceremonia cargada de reconocimiento, historia y sensibilidad musical”, destacó el rector Ivaldo Torres.
Esta actividad fue posible gracias a la gestión de la docente Caroline Gama y la decana de la Facultad de Artes y Humanidades, Karol Martínez, en el marco del II Festival de Piano que se llevó a cabo del 9 al 12 de junio.
El programa de música de la Universidad, único en la región, actualmente forma a dieciséis estudiantes en piano. La música, como lenguaje universal, fue protagonista de una noche inolvidable que reafirmó el compromiso de la Universidad de Pamplona con el arte y la cultura, honrando trayectorias que inspiran a nuevas generaciones.
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion.