Hacia la medianoche de este lunes, 9 de septiembre, tras horas de tensiones y discusiones en Tibú, Norte de Santander, quedó listo el decreto para dar el primer paso en el marco de las negociaciones entre el Gobierno de Gustavo Petro y las disidencias de las extintas Farc, Estado Mayor Central, en cabeza de Iván Mordisco.
Como antesala a las negociaciones, el Ministerio de Defensa expidió el decreto número 1640 de 2023 con el que quedaron en firme las reglas para el cese de operaciones militares contra el Estado Mayor Central, en parte como garantía para adelantar los diálogos de paz.
“Las delegaciones acá reunidas manifestamos que se requiere un mayor alistamiento previo, para poner en marcha todos los mecanismos necesarios para el Cese al Fuego Bilateral y Temporal de carácter Nacional (CFBTNT), los cuales contienen un énfasis en la protección de la población civil”, anunciaron en el comunicado conjunto.
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Si bien el anuncio del cese bilateral ya se había dado en medio de la cita del lunes, con el documento en mano quedó establecida la orden de iniciar el cese a partir de este martes, 10 de octubre hasta el próximo 16 de octubre, cuando se espera que se le dé apertura a la mesa de negociación.
“La suspensión de las operaciones militares ofensivas y las operaciones de Policía se hará sin perjuicio del cumplimiento de la función y obligación y legal de la Fuerza Pública de preservar la integridad nacional, garantizar el orden constitucional y legal y asegurar las condiciones necesarios para el ejercicio de los derechos y libertades públicas en todo territorio nacional”, fijó el decreto.
En ese contexto, el Gobierno Petro fue enfático en cuanto a la necesidad de suspender la ofensiva de lado y lado de manera temporal como medida para disminuir la confrontación que en las últimas semanas se estaba desbordando en el país.
“A partir de hoy las partes hemos tomado la decisión de parar la guerra y continuar con el Proceso de Paz iniciado entre el Estado colombiano y el Estado Mayor Central de las FARC-EP, como forma para materializar una paz estable y duradera con justicia social y ambiental”, anunciaron las partes en un comunicado.
El decreto también cobija un artículo con el que se espera crear un equipo especial de contingencias conformado por un representante de cada lado, es decir, del Ministerio de Defensa, de las Fuerzas Militares, de la Policía Nacional, la delegación del Gobierno y de las disidencias de las Farc con el fin de monitorear la suspensión de operaciones militares.
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También participarán como garantes la Misión de Verificación de Naciones Unidas, la Misión de Apoyo al proceso de Paz de la OEA, la Conferencia Episcopal de Colombia para evitar incidentes entre las partes.
El cese al fuego iniciará desde las 24:00 horas del 10 de octubre y tendrá vigencia hasta las 24:00 horas del 16 de octubre de 2023. Una vez se venza el plazo de este decreto, el Gobierno Petro tendrá que expedir otro documento con los protocolos y el mecanismo definitivo del cese de operaciones.
Mientras tanto, la mesa preparatoria de los diálogos continuará instalada en Tibú, Norte de Santander y las delegaciones seguirán trabajando en la agenda. Cuando la mesa de negociación finalmente se instale, entonces será itinerante y tendrá ciclos en regiones del país afectadas por el conflicto armado.
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