Desde la semana pasada en la Penitenciaría de Cúcuta hay un ambiente tenso y lleno de incertidumbre. Y todo por cuenta de que las autoridades judiciales se enteraron de que allí se estaría organizando una guerra por el control del patio 24A y por eso ingresaron ilegalmente una pistola y tres granadas.
Ante eso, unidades especiales del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) vienen adelantando operativos en diferentes puntos de la prisión para ubicar ese material de guerra.
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Hace varios días, unidades del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) le solicitaron al INPEC el ingreso al patio 24A, pues conocieron por una fuente que el arma estaba enterrada al lado de un árbol.
Y así fue. Cuando los funcionarios del CTI llegaron al sitio que les indicaron, movieron la tierra, encontrando enterrada la pistola que estaba envuelta en una tela blanca y metida en una bolsa negra.
Los investigadores de inmediato decomisaron el arma, pero no pudieron establecer qué prisionero la recibió.
Pero esa no fue la única alarma que recibieron las autoridades y el INPEC, pues también conocieron que tres granadas de fragmentación fueron entradas ilegalmente a la cárcel.
Y por eso, de inmediato los guardianes del INPEC comenzaron las requisas estrictas en los calabozos, así como en los patios y baños, pero hasta el momento no han logrado dar con los explosivos.
“Donde lancen esas granadas dentro de algún patio, habrá varios muertos y heridos. Por eso es que el INPEC está alerta”, comentó una fuente judicial.
¿Quién está detrás de eso?
Las autoridades judiciales han conocido que, supuestamente, Evert Carreño Corredor, alias Porras, quiere que ese patio sea dominado por sus hombres, que permanecen recluidos ahí, pero un delincuente que se hace llamar ‘Cobre’ no lo estaría permitiendo.
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“‘Porras’ ya domina dos patios de la cárcel, por medio de sus hombres, pero ahora quiere tener el control del 24A y por eso dio la orden de tenerlo a como dé lugar”, indicó la fuente.
Los investigadores han podido establecer que alias Cobre es familiar de la abuela que asesinaron el pasado 16 de agosto, en el barrio Brisas del Aeropuerto.
“Lo que nos ha arrojado la investigación es que ese crimen fue ordenado por ‘Porras’ por esa guerra por el control de los patios de la cárcel”, explicó la fuente judicial.
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