Un mes se cumple ya desde que el cese bilateral del fuego entre la Fuerza Pública y la guerrilla del Eln llegó a su fin, y en este momento son pocas las señales que demuestren un interés en reanudar prontamente las conversaciones de paz entre las dos partes.

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Por el contrario, la confrontación en regiones como Norte de Santander volvió a activarse y a la fecha son varios los hechos violentos que mantienen encendidas las alertas entre las comunidades.

En vista de este panorama, la Coordinadora Humanitaria Nacional, conformada por más de 700 organizaciones sociales de los 16 territorios más afectados por el conflicto armado, hicieron un llamado urgente al Gobierno y a la guerrilla, para que cuanto antes reactiven la mesa de diálogos.

En una carta abierta, los representantes de la sociedad civil insisten en que son los niños, los campesinos, las mujeres, los afros, indígenas y los líderes sociales, los que están sufriendo las consecuencias del conflicto armado que no cesa en el país.

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“La crisis humanitaria que vivimos en los territorios es aterradora. El no respeto a la vida, el incumplimiento por parte de los actores armados del Derecho Internacional Humanitario (DIH), la no aplicación de los mínimos humanitarios que nos permitan sobrevivir al conflicto es muestra de ello”, manifestaron las organizaciones.

 Y plantearon que es prioritaria la reactivación del cese al fuego entre las partes y, paralelamente, de los Mecanismos de Monitoreo, Verificación y Veeduría tanto nacional, regionales y locales.

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