Tras haber vivido durante varios años en Austin, Texas, una ciudad reconocida por su ambiente urbano y diversidad cultural, una migrante venezolana tomó la decisión de cambiar radicalmente su estilo de vida. Junto con su pareja, se trasladó a un pequeño poblado del mismo estado con el objetivo de encontrar mayor tranquilidad, una conexión más cercana con la naturaleza y reducir los costos de vida.
La mujer, conocida en redes como Sarita, compartió su experiencia en un video que publicó en TikTok. Lo primero que le sorprendió al llegar a su nuevo hogar fue la falta absoluta de diversidad étnica. “Me mudé a un pueblito y creo que, literalmente, es el único en Estados Unidos en el cual no existen los latinos”, expresó en su testimonio.
Según relató, todos los residentes del lugar son personas blancas estadounidenses. “Son todos gringos”, afirmó. Esta uniformidad no solo es evidente en sus costumbres y estilo de vida, sino también en la apariencia física de sus habitantes.
Rasgos físicos y culturales
Sarita detalló que su imagen contrasta de forma evidente con la de los demás vecinos. Mientras que la mayoría tiene piel clara y ojos azules o verdes, ella, como mujer latina, presenta rasgos característicos de su origen, como su piel trigueña.
Esta diferencia ha despertado curiosidad entre quienes la rodean. Contó que ha recibido comentarios que dan a entender que algunos la consideran hija de personas afrodescendientes. A eso se suma otra dificultad: la barrera del idioma. “Ninguno habla español”, señaló. La comunicación se da exclusivamente en inglés, lo que representa un obstáculo para quienes no dominan bien la lengua.
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Entre risas, explicó que la abordan siempre en inglés, lo que intensifica su sensación de ser distinta. “Soy la única latina”, reiteró.
