Este domingo, 6 de abril, se dio una sorpresa en El Vaticano tras la reaparición del papa Francisco ante los fieles en la Plaza de San Pedro, al final de la misa del Jubileo dedicada a los enfermos.
Lea también: 281 actores políticos, periodistas y activistas de DD.HH. han sido arrestados en Venezuela en menos de un año
El pontífice, de 88 años, se encontraba convaleciente y asilado en su residencia vaticana desde el pasado 23 de marzo, cuando salió del hospital Gemelli de Roma después de 38 días ingresado por una neumonía bilateral y otros problemas respiratorios.
Francisco fue llevado en una silla de ruedas desde el interior de la basílica de San Pedro hasta el altar situado en la plaza para las misas públicas y pronunció unas breves palabras, con cierta dificultad por las cánulas nasales que usa para recibir oxígeno.
“Buen domingo a todos, muchas gracias”, expresó el papa a los fieles, para después recorrer parte de la plaza impartiendo bendiciones.
Entre emoción y aplausos se coreó la frase “viva el papa”
Después, una mujer leyó un mensaje en su nombre en el que saluda “con afecto” a todos los que han participado en la misa del Jubileo de los Enfermos y agradeció “de corazón” las oraciones por su salud.
El papa Francisco fue ingresado el pasado 14 de febrero en el hospital Gemelli de Roma a causa de una pulmonía bilateral y otros problemas de salud.
Permaneció hospitalizado durante 38 días, hasta que salió del centro el 23 de marzo para proseguir su terapia en su residencia del Vaticano, la Casa Santa Marta.
Antes de abandonar el hospital, el pontífice argentino se hizo ver desde un balcón del hospital, desde donde saludó a los fieles de la calle sentado en una silla de rueda y unas breves palabras.
Entérese: Jorge Enrique Abello: de galán icónico a productor de risas
“Agradezco a todos”, dijo con una voz débil ante la multitud, y agregó: “Veo a esa señora con las flores amarillas, es brava”.
Desde aquel domingo 23 de marzo Francisco ha seguido su convalecencia aislado en la Casa Santa Marta, sin recibir visitas ni participar en ceremonias como la del pasado 2 de abril, cuando se conmemoró el 20 aniversario de la muerte del papa y santo Juan Pablo II.
La última información médica brindada por la Santa Sede apunta que su salud mejora, mientras prosigue su terapia farmacológica y la fisioterapia motora y respiratoria.
Asimismo mejora en el uso de la palabra y, aunque todavía necesita la suministración de oxígeno por cánulas nasales, en momentos del día se le reduce.
Con el papa convaleciente, las misas más importantes son celebradas por cardenales, y por el momento no se ha aclarado qué papel tendrá en los ritos de la Semana Santa (el próximo 20 de abril es la Pascua).
Tomado de El Universal
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion .