Un rutinario puesto de control de la Policía de Tránsito y Transporte de Norte de Santander terminó convirtiéndose en el hallazgo de más de 20 kilos de base de coca que era transportada desde el Catatumbo. Durante el procedimiento, las autoridades lograron la incautación de la droga y la captura de quien lo transportaba.

La acción se llevó a cabo el pasado viernes, a las 8:00 de la noche, en la vía que comunica a Sardinata con Cúcuta, en el kilómetro 49, a la altura del sector La Colorada, cuando los uniformados decidieron realizar una inspección a una camioneta marca Lada, color beige, y de placas BCX041.

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La actitud nerviosa que tomó el conductor del vehículo al solicitarle el registro levantó sospechas en los policías, quienes no dudaron en comenzar a revisar detalladamente el automotor. Durante este proceso, se percataron de que los guardafangos estaban cubierto de lodo seco, aumentando aún más sus dudas.

Cuando lo retiraron por completo, se encontraron con un panorama muy particular: hallaron una masilla color rosa que parecía ajena al sistema que maneja el vehículo; por lo que no dudaron en removerla de manera inmediata.

En el momento en que decidieron hacer el retiro, los policías se dieron cuenta de que había cierta modificación en la camioneta, por lo que procedieron a levantar una lámina de metal que estaba incrustada y se llevaron una sorpresa: el hombre tenía una ‘caleta’.

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Allí, había 10 tarros transparentes de tapa roja, 12 envases plásticos de color amarillo y cuatro paquetes rectangulares envueltos en cinta plástica de color negro. Al verificar lo que contenían, las autoridades se encontraron con 24 kilos de una sustancia rocosa de color beige, que por sus características y olor se asemejaban a la base de coca, la cual estaría valorada en más de 300 millones de pesos.

Ante lo anterior, las autoridades procedieron con la captura inmediata del conductor, a quien identificaron como Carlos Julio Silva Gélvez, y lo trasladaron de manera inmediata a la Fiscalía para enfrentar cargos por el delito de tráfico de estupefacientes. Tras ser escuchado por un juez, fue enviado a la cárcel.

Según una fuente judicial, el alcaloide que llevaba Silva Gélvez en la camioneta,  habría sido transportado desde Tibú.

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Por su parte, el coronel Néstor Arévalo, comandante de la Policía Norte de Santander, señaló que “con este golpe al tráfico de estupefacientes, se reitera su compromiso de combatir las rentas criminales de grupos al margen de la ley que operan en el departamento e invita a la comunidad a denunciar cualquier hecho que afecte la vida en integridad de los habitantes”.

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