Para la familia de Miguel Ángel Leal Cristancho es increíble pensar que la misma persona con la que había compartido una corta amistad, hasta llegar a tomarse fotos, fue el presunto responsable de acabar con su vida, cuando el pasado miércoles le disparó en medio de una discusión.

El hombre, de 37 años, era conocido en el pueblo por ser servicial, tranquilo y lleno de carisma al compartir con sus conocidos. Además, era un fiel hincha del Cúcuta Deportivo.
 
Según su familia, era un líder dentro de la hinchada motilona en Chinácota, de donde se transportaba hasta Cúcuta en cada ocasión, para alentar en el estadio General Santander al ‘cuadro motilón’. Él era quien tomaba la iniciativa y motivaba a su comunidad para ir juntos en un bus hacia la ciudad.

La víctima, se dedicaba a cuidar algunas cabañas en el municipio. “Él era tranquilo y servicial, mucha gente lo apreciaba. Jamás pensamos que una cosa de estas pudiera pasar así”, aseguró un familiar.

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El dolor que también invade a su familia es la idea de saber que Leal Cristancho no verá crecer a su hija de seis años y sumado a ello, en los mismos hechos, su hermano salió herido. 

La pelea

Mientras Miguel Ángel y su hermano caminaban de regreso de uno de sus trabajos, a una cuadra de la estación de Policía de Chinácota, se encontraron con un hermano de ‘Manolo’, como es conocido el presunto homicida, a quien le hizo un reclamo por un hecho aún confuso para los familiares. 

“No sabemos cómo fue, al parecer el muchacho (el hermano del asesino) había hurtado algo, lo que hizo que Miguel cuando se lo encontró le reclamara”, dijo un familiar.

Pero, la discusión cambió de tono y los ánimos empezaron a alterarse, cuando ‘Manolo’ intervino.

Lo que sorpresivamente hizo violento el asunto, fue cuando ‘Manolo’ sacó un arma y sin premeditarlo disparó en varias ocasiones.

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Una de esas balas impactó en la espada de Miguel Ángel, dejándolo gravemente herido. Las personas que estaban cerca al lugar lo auxiliaron, trasladándolo al hospital del municipio, donde finalmente murió.

“Lo que parece es que no le gustó (‘Manolo’) que le reclamaran al hermano, por lo que sacó una pistola y les disparó”, reiteró el familiar.

Después del hecho, sin asimilar aún lo que había sucedido, el hermano del pistolero se entregó a las autoridades. Minutos después, hizo lo mismo el presunto asesino.

‘Le dolió más la sangre que la amistad’, dijo uno de sus familiares, queriendo decir que prefirió defender a su hermano, en vez de pensar en su amigo.

La Policía de Norte de Santander adelanta el registro y orden de captura para que ‘Manolo’ responda por este hecho.

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