En medio de un aparente atraco en una serviteca, en la parte baja del barrio Tucunaré, de la ciudadela Juan Atalaya, protagonizado por cinco presuntos delincuentes, se desató una balacera con una patrulla de la Policía Metropolitana de Cúcuta que dejó a uno de los supuestos asaltantes muerto y a otro, menor de edad, herido.
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El hecho ocurrió a las 4:00 de la tarde de ayer, cuando el grupo de ladrones entró al establecimiento comercial para intimidar a los empleados y exigirles que les entregaran los celulares y otros elementos de valor, además del dinero producido del día.
Uno de los atracadores bajó la puerta metálica del negocio, mientras que sus cómplices continuaban con el plan, por lo que esto fue lo que generó la sospecha de una patrulla de la Policía que pasaba por el lugar en ese momento y se percató de que algo estaba ocurriendo en el local ubicado en la manzana 9, por la Autopista de Atalaya.
Los uniformados detuvieron su marcha, mientras que uno se acercó y alcanzó a escuchar los gritos de los empleados y las intimidaciones de los presuntos ladrones, por lo que al intentar ingresar fueron recibidos a disparos, desencadenando la reacción y el intercambio de balazos que se prolongó durante algunos minutos.
En la acción, dos de los delincuentes fueron impactados y quedaron tendidos en el lugar, mientras que los otros tres acompañantes alcanzaron a huir en las motocicletas en las que habían llegado para cometer el atraco, dejando a sus cómplices abandonados.
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Cuando todo retornó a la calma, los policías trasladaron a los heridos al policlínico de Atalaya, que está muy cerca de la escena del hecho, donde finalmente murió Jesús Alejandro Díaz Rodríguez, de 20 años, quien fue impactado en el pecho en dos oportunidades. Mientras tanto, el adolescente, de 17, recibió un impacto en un brazo, por lo que hasta el cierre de esta edición continuaba en atención médica.
“Los uniformados se incautaron de un revólver que tenían el adulto y el menor de edad, con el que los atacaron. Además, se están recolectando los videos de las cámaras de seguridad para identificar a los que escaparon”, aseguró una fuente judicial cercana a las pesquisas.
La unidad de contra atracos de la Sijín se encargó de la inspección en el lugar del hecho y del levantamiento del cadáver, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal.
Asimismo, los uniformados de la Policía de Infancia y Adolescencia asumieron el proceso que afrontará el menor de edad tras ser aprehendido.
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