Los videos que analizó la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) en las pesquisas del asesinato de un niño de 14 años, ocurrido el 15 de enero, en la avenida 1 entre calles 4 y 5, del barrio Doña Nidia, fueron fundamentales para empezar a seguirles la pista a los presuntos autores del hecho.

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Así fue como los investigadores descubrieron la placa de una de las tres motocicletas en las que llegaron los homicidas al lugar del hecho y también en las imágenes pudieron observar dos tatuajes de uno de los sospechosos en un brazo y una pierna, además del rostro.

De inmediato la Brinho inició la búsqueda de la motocicleta involucrada y así fue que constató que Yeyson Antonio Niño Moros presuntamente fue quien les entregó el arma a sus dos cómplices para que intimidaran a dos hermanos y a uno de sus amigos, que estaban sentados en un andén, frente a la vivienda, para robarles un celular.

Con la orden de captura contra Niño, por homicidio agravado y porte ilegal de armas, lo capturaron en el barrio Belén, cuando lo sorprendieron en la avenida 26 con calle 25. Sin embargo, cuando él se percató de la presencia de los uniformados, intentó escapar, por lo que tuvieron que perseguirlo para interceptarlo.

El detenido quedó a disposición de la Fiscalía y luego de cumplirse las audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento, un juez decidió enviarlo a la cárcel.

El crimen

Según se conoció, la víctima junto con su hermano llegó a la casa de su amigo, con la intención de que le prestaran el celular para abrir sus redes sociales, como siempre lo acostumbraba a hacer.

Los menores se sentaron en el andén de la vivienda, cuando de repente llegaron los dos atracadores para exigirles que les entregaran el equipo móvil, a lo que el dueño del celular reaccionó corriendo para refugiarse en su vivienda y así evitar que lo robaran.

Mientras tanto, los dos hermanos se quedaron sentados y en ese momento uno de los pistoleros disparó e impactó al menor de 14 años, que finalmente perdió la vida.

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“El parrillero se bajó de la moto, le apuntó a una persona que se refugió en la casa, cuando disparó impactó al menor de edad. En ese momento el mismo hermano lo auxilió y lo trasladó hasta el Policlínico de Atalaya, donde falleció minutos más tarde”, indicó una fuente judicial.

Los habitantes de la zona en el momento del hecho lamentaron el crimen, pues el menor de edad iba constantemente a la vivienda a encontrarse con su amigo para jugar.

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