La mirada de una familiar de Eliécer Rodríguez Estrada, quien fue asesinado el miércoles, frente a la ferretería donde trabajaba, en el barrio Niña Ceci, refleja temor, resignación y hasta rabia.

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Una extorsión al propietario del negocio ronda los móviles del crimen que alteró el ajetreo comercial sobre la calle 2 entre avenidas 2 y 3, de este sector de la ciudadela Juan Atalaya.

Los sospechosos del ataque a balazos, que se dio a las 5:00 de la tarde del miércoles, son una mujer, que conducía una moto Auteco, azul, vestida con un buzo rosado y un casco negro, y el parrillero, quien llevaba puesto un buzo azul y un casco, blanco.

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Según se conoció, cuando la pareja de pistoleros llegó al lugar, el parrillero se bajó de la moto y empezó a disparar contra las instalaciones de la ferretería.

Justo en ese momento, Rodríguez Estrada estaba con su jefe acomodando unos tubos en la parte externa del establecimiento, por lo que fue alcanzado por una de las balas en la parte derecha del abdomen.

Cuando los agresores vieron caer herido al empleado, emprendieron la huida dejando momentos de desesperación y temor entre los comerciantes y transeúntes que frecuentan la zona.

Los compañeros de trabajo de la víctima la auxiliaron y la trasladaron rápidamente al Policlínico de Atalaya, desde donde fue remitido al Hospital Universitario Erasmo Meoz, donde finalmente murió a las 8:30 de la noche.

Miembros de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) se encargaron de la inspección en el lugar del hecho y del levantamiento en el centro médico.

Alrededor de la escena del crimen hay varias cámaras de seguridad, por lo que las autoridades tendrán que analizar detalladamente los videos para identificar a los responsables del asesinato.

¿Qué está pasando?

De manera extraoficial se conoció que, al parecer, entre el martes y el miércoles se registraron tres ataques a bala en las instalaciones de algunas ferreterías, en Atalaya, donde han extorsionado a sus propietarios.

Al parecer, un hombre que estaba detenido en la cárcel de Cúcuta y que ahora estaría en una prisión de Jamundí (Valle) sería el responsable de estas extorsiones.

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No obstante, esto deja entrever que los delincuentes ahora no solo extorsionan bajo la modalidad carcelaria, sino que se estaría convirtiendo en una estrategia mixta, pues aprovechan que sus cómplices están en libertad para ordenarles cometer dichos ataques e intimidaciones.

“En una oportunidad estaban programando una reunión por los lados del barrio Antonia Santos. Además, estos delincuentes ubican las casas de las víctimas y las intimidan enviándoles fotografías o videos y las obligan a pagar, advirtiéndoles que si no pagan tendrán que arreglar con pólvora o dinamita”, explicó una fuente policial.

Se presume que los pistoleros no pretendían asesinar a Eliécer Rodríguez, sino generar una advertencia contra el propietario del establecimiento.

La racha

Cabe recordar que la tarde del martes, en la calle 25 con avenida 7 del barrio Santo Domingo, fue asesinado de al menos once balazos Deninxon Alexander Caicedo Quintero, mientras se estaba cortando el cabello en una barbería, junto con su hijo.

En medio del ataque que protagonizó un pistolero que tenía puesto un casco de protección y un pasamontañas, un niño de 2 años resultó herido con un impacto en la cara, siendo remitido al Hospital Universitario Erasmo Meoz. 

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