Con la reciente captura de Jony Ricardo Vilora Sierra, alias El Gordo, señalado de participar en la masacre que dejó cuatro personas muertas en Barrio Nuevo, el pasado 27 de agosto, las autoridades empezaron a armar el rompecabezas del trágico hecho, para esclarecer los móviles que desencadenaron el ataque a balazos.
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Precisamente, la Fiscalía aseguró que Jhoswar Saúl Hernández Sanabria, ‘Saúl’ o ‘La S’, presunto líder de la temible banda delincuencial conocida como ‘AK-47’, a la que pertenece ‘El Gordo’, al igual que Luis Felipe Colmenares Mojica, son buscados con circular azul de Interpol, por este mismo hecho de sangre.
Según las autoridades, la banda de ‘Saúl’, que se dedica al microtráfico y a cometer homicidios especialmente en el centro de Cúcuta, es la responsable de la masacre, por lo que, ‘El Gordo’, junto con tres hombres que habían sido detenidos un día después del hecho, deberán responder por el crimen.
La captura de Vilora se dio el pasado viernes, en un barrio de la Comuna 9, luego de que los funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía en coordinación con uniformados de la Dijín de la Policía, tuvieran abundante material probatorio en su contra, para que responda por homicidio agravado y porte ilegal de armas.
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Según lo que se logró determinar en la investigación, es que, al parecer, ‘El Gordo’, fue uno de los pistoleros que llegaron en motocicletas y taxis al lugar del ataque, y dispararon sin piedad contra Rodrigo Alberto Herrera, un vendedor informal, quien al parecer era un expendedor de drogas, y luego contra Miguel Sebastián Melano Torres, Óscar Eduardo Sandoval Higuera y Gino Álvarez Vergel, tres amigos que estaban tomando cerveza a pocos metros del vendedor.
Vilora fue enviado a la cárcel luego de ser presentado en audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento.
Los primeros rastros
Al día siguiente de la masacre, luego de que las autoridades analizaran a detalle varios videos del lugar del hecho, y recopilaran la versión de testigos, se inició un proceso judicial para detener a tres personas que estarían involucradas en el ataque.
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Unidades de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brihno) llegaron hasta el conjunto residencial Los Arrayanes, donde capturaron a un hombre y en los sectores aledaños detuvieron a otras dos personas, señalados de ser integrantes de la banda de ‘Saul, a los que les hallaron dos granadas y dosis de drogas.
Aunque después de las audiencias concentradas fueron enviados a prisión por porte ilegal de armas, debido a las indagaciones que han adelantado los investigadores, al parecer, también están vinculados en la masacre.
El terror de ‘Saul’ en el último mes
La estela de muerte, drogadicción y miedo que ha dejado Jhoswar Hernández durante meses, ha ido en aumento. Solamente en octubre, las autoridades le atribuyen a su banda delictiva tres atentados en distintos puntos de la ciudad que dejaron dos muertos y seis heridos.
El primero se dio el lunes 10 de octubre, a las 8:00 de la noche, cuando Luis Aníbal Meneses Torrado, quien era un soldado profesional, de 36 años y Anderson Gabriel Jaimes García, enfermero, de 22, y un adolescente de 17, estaban en una vivienda ubicada en un sector conocido como Callejón García, del barrio Los Alpes.
Hasta allí llegaron cinco pistoleros que irrumpieron en la casa, desenfundaron sus armas y dispararon contra estas tres personas. Luis Meneses y Anderson Jaimes murieron, mientras que el menor recibió un disparo en el abdomen y alcanzó a ser trasladado a un centro asistencial.
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Una hora después, la Policía Metropolitana de Cúcuta hizo un plan ‘candado’ y capturó a los cinco sospechosos, en el barrio 28 de Febrero, con tres pistolas, un revólver, munición y pertenencias de las víctimas. Luego de ser presentados en audiencias concentradas, estos cinco hombres fueron judicializados por homicidio y porte ilegal.
Tres días más tarde, en la calle 5 con avenida 7 del barrio El Callejón, un hombre, al parecer, por órdenes de ‘Saúl’, lanzó una granada, en una cervecería, dejando a tres personas lesionadas con esquirlas y aturdimiento.
Lo que se conoció, de forma extraoficial, es que este hecho respondería a una retaliación por extorsiones de la banda ‘AK-47’.
El último hecho violento se dio el domingo pasado, cuando varios hombres de esta estructura intentaron provocar una fuga de presos en las instalaciones del CAI de Alfonso López, por lo que se enfrentaron a balazos con un suboficial de la Policía Metropolitana de Cúcuta que resultó herido.
Cuatro hombres llegaron en un carro hasta la esquina del CAI y mientras uno se quedó en el vehículo, los otros tres se enfrentaron con el uniformado que estaba atendiendo a una mujer, que también resultó herida en la balacera. Un perro murió en el hecho.
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