La angustia, el miedo y la zozobra aumentan con el paso de las horas tras la desaparición del cucuteño Jaime Alexander Peña Mendoza, quien cruzó la frontera hacia Venezuela en compañía de dos hombres a quienes les estaba prestando un servicio de transporte.

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La última noticia que tuvieron los familiares de Alex fue el 30 de agosto, un día después de que las autoridades venezolanas lo detuvieran en el Puente Internacional Atanasio Girardot, que conecta el sector de Tienditas, en el municipio Ureña, Táchira, con la capital nortesantandereana.

El motivo de la retención, según versiones preliminares, habría sido que los dos pasajeros que transportaba tenían problemas con la ley. Ese día, Yeimy Esperanza Corzo, esposa de Peña Mendoza, logró hablar con él gracias a una llamada que las autoridades le permitieron realizar, en la que le contó lo sucedido.

De inmediato, la mujer se desplazó hacia la frontera. Allí, la Guardia Nacional Bolivariana le permitió verlo. Según relató al Diario La Nación de Táchira, Jaime Alexander estaba sentado, llorando, mientras que los otros dos hombres permanecían esposados.

Las autoridades venezolanas le habrían informado que su esposo quedaría bajo custodia hasta la llegada de funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), organismo encargado de prevenir actividades de espionaje y otros delitos contra la seguridad del Estado.

El argumento de las autoridades para la retención de Alex habría sido que no estaba afiliado a una línea oficial de taxis y que, al trabajar con una aplicación de transporte, debía ser investigado. Sin embargo, desde ese momento, la familia no ha vuelto a tener noticias sobre su paradero ni sobre el vehículo en el que se movilizaba, un Chevrolet blanco.

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“¿Dónde está papá?”

La angustiosa desaparición de Alex llena de incertidumbre a sus familiares, quienes denuncian falta de transparencia y presuntas irregularidades en el manejo del caso.

“Él está retenido por funcionarios de la DGCIM de forma arbitraria, sin tener ningún problema legal con la justicia”, denunció Corzo.

La pareja lleva diez años de relación y tiene un hijo de cinco años, quien pregunta constantemente por su padre y cuándo regresará. Yeimy describe a su esposo como un hombre trabajador y honesto, con cinco años de experiencia trabajando con aplicaciones de transporte, que aquella noche solo buscaba llevar el sustento a su hogar cuando se encontró con un problema inesperado.

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La carrera del problema

El incidente ocurrió minutos antes de las 11:00 p.m. del 29 de agosto. Mientras trabajaba, el cucuteño se habría encontrado con dos hombres en la carretera, quienes le pidieron que los llevara a Tienditas.

Durante un control rutinario, la Guardia Nacional Bolivariana los detuvo para revisar el vehículo y verificar la identidad de los pasajeros. En ese momento, las autoridades confirmaron que los dos hombres tenían asuntos pendientes con la justicia venezolana, motivo por el cual fueron arrestados.

Aunque Alex no tenía antecedentes ni problemas legales, la falta de registro oficial como prestador de servicios de transporte y su presencia junto con los pasajeros equivocados terminaron por costarle su libertad.

Hasta el momento, no se ha revelado la identidad de los dos hombres detenidos ni la naturaleza de los procesos judiciales que enfrentan. Además, ninguna autoridad, ni colombiana ni venezolana, ha emitido un comunicado oficial sobre el caso.

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La familia de Alex continúa buscándolo desesperadamente. Han acudido a San Antonio, Ureña y San Cristóbal, tratando de obtener información sobre su paradero. También denunciaron la desaparición ante las autoridades colombianas y presentaron el caso en el Consulado de Colombia en San Antonio, pero hasta ahora no han obtenido respuestas.

“Lo único que queremos es que vuelva a casa. No sabemos nada de él, no tenemos noticias, nadie nos da información”, expresó Corzo entre lágrimas.

Los familiares hacen un llamado urgente a los entes estatales de ambos países y a las organizaciones de derechos humanos para que intervengan en el caso y se logre el pronto regreso de Alexander Peña con sus seres queridos.

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