Las redes sociales fueron el medio por el cual la familia de Anibar Ramírez Rojas se enteró que había sido asesinado, cuando se tomaba unas cervezas en una tienda del barrio Aeropuerto.
Impactados, no les quedó de otra que retomar la comunicación con sus familiares que quedaban en Venezuela, pues de allá era oriundo el hombre, de 38 años.
Aunque se presumía que Anibar, trabajaba cuidando chivos en la vía a Puerto Santander, sus familiares recordaron que últimamente se dedicaba a ser costurero en el barrio. Dentro de su costumbre todos los fines de semana estaba salir y tomarse unas cervezas con sus amigos.
Sin hijos ni esposa, su vida se basaba en disfrutar de cada instante y con las personas que estuvieran cerca. “Él era una persona muy alegre, extrovertida. Sabemos que no estudió, se escapaba de las clases. Pero, siempre lo conocimos como una buena persona (…)”, manifestó una de sus primas.
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Anibar Ramírez llegó a vivir en Cúcuta desde el 2020, cuando iniciaba la pandemia de la COVID-19. En ese entonces empezó a trabajar en un tejar en la vía que lleva a Puerto Santander.
Desde hace más de 5 años, algunos familiares no sabían sobre él, pero el recuerdo que les quedaba en su mente era gracioso, pues siempre se mostraba alegre.
“La última vez que lo vivimos fue hace como cinco años. Casualmente él llegó a una casa cercana donde nosotras vivimos. Iba a visitar una novia, pero no le abrió. Entonces, nosotras aprovechamos y nos comimos las hamburguesas que le llevaba”, dijo entre risas otra mujer.
En vez de llorar y profundizar en el dolor a los parientes no les quedaba más que recordar cada historia y anécdota que la vida les permitió conocer de Anibar. “Nos quedamos esperando los uniformes que un día le prometió a los niños, pero él era así, ya todas lo sabíamos”, añadieron.
Sin identificar
“No lo identificaron (el día del crimen) porque él nunca cargaba documentos”, manifestaron las mujeres.
Cuando se enteraron de la muerte, una tía de la víctima se encargó de buscar su documentación y dirigirse a la Fiscalía donde dijo que ella lo conocía. De ese modo, la familia lo reconoció y le podrán dar el último adiós.
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Su lugar de origen es Apure, por eso su familia esperaba, el pasado lunes, en el Instituto de Medicina Legal para que una funeraria se encargara de trasportarlo hasta Arauca y después enviarlo a dicho estado venezolano, donde finalmente será velado y enterrado.
El homicidio
Anibar Ramírez Rojas fue asesinado el pasado sábado a las 4:10 de la tarde, cuando se tomaba una cerveza con unos conocidos en una tienda, ubicada en la calle 18 con avenida 1.
Cuando la Policía llegó al lugar revisó las cámaras de seguridad por los alrededores y recogió testimonios de los testigos.
Fue así como conocieron que un hombre que vestía de negro y se movilizaba en una moto Suzuki GN, arribó a ese punto y luego de estacionarse a unos metros del negocio se bajó, caminó hasta donde estaba la víctima y le disparó en repetidas oportunidades.
Una vez cometió el hecho, el pistolero volvió a su moto y huyó tranquilamente, bajo las miradas impotentes de quienes presenciaron todo el trágico suceso.
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