Al subintendente Javier Fuentes Torrado y a la patrullera Isamar Alejandra Andrade Muñoz les salió muy caro el hecho de salirse de su jurisdicción para, supuestamente, escoltar un vehículo particular.
Sobre todo para la uniformada, quien habría agredido a un patrullero con más antigüedad en el momento en el que les reclamaban el por qué interferían en un procedimiento de requisa.
Todo inició el pasado 27 de octubre a las 4:25 de la mañana, cuando los dos uniformados, que están adscritos al CAI San Rafael, decidieron abandonar sus funciones para escoltar un vehículo.
Al momento, las autoridades desconocen los motivos por el que los policías lo hicieron y quiénes estaban a bordo del automotor.
Según se conoció, de un momento a otro una patrulla llegó hasta donde se encontraban los uniformados junto al carro.
Los otros policías se sorprendieron al ver esa escena, por lo que abordaron el automotor para requisar a los ocupantes.
En ese momento, el subintendente Javier Fuentes y la patrullera Isamar Andrade, supuestamente, trataron de impedir que sus compañeros hicieran su trabajo. Además, la uniformada agredió físicamente a un superior.
“Los indiciados se encontraban prestando servicio de acompañamiento a los ocupantes del vehículo fuera de la jurisdicción asignada, incumpliendo órdenes de los superiores”, dice un reporte policial.
Los capturaron
El hecho fue reportado a la Justicia Penal Militar, por lo que el Juzgado 1734 de control de garantías de la ciudad de Cúcuta emanó las órdenes de captura contra el subintendente Fuentes y la patrullera Andrade.
Según se conoció, el subintendente fue acusado de los delitos de abandono del puesto y desobediencia, mientras que la patrullera por abandono del puesto, desobediencia y ataque al superior.
Los dos uniformados fueron presentados en audiencias y se les dio medida de aseguramiento de detención preventiva.
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