El "rey del fútbol" Pelé fue vacunado este martes contra el COVID-19 y afirmó que se trata de "un día inolvidable", llamando a no bajar la guardia contra la pandemia que está matando a más de 1.100 personas por día en Brasil.
"Hoy fue un día inolvidable. ¡Recibí la vacuna!", escribió en su cuenta en Instagram el exdeportista, de 80 años.
O Rei acompañó su mensaje con una fotografía en la que aparece con tapabocas y alzando el pulgar izquierdo mientras le aplican el inmunizante.
"La pandemia no terminó. Necesitamos mantener la disciplina para preservar vidas porque muchas personas aún no han sido vacunadas", afirmó el exfutbolista brasileño, quien además abogó por el uso de máscaras sanitarias, el aislamiento y el lavado de manos para combatir el virus.
"Esto (la pandemia) va a pasar si logramos pensar en el prójimo y ayudar a los otros", agregó.
La asesoría de prensa de Pelé no respondió inmediatamente el pedido de la AFP para esclarecer dónde se realizó la vacunación, cuál inmunizante se aplicó y si se trata de la primera o la segunda dosis de las dos vacunas autorizadas hasta ahora en Brasil (la china CoronaVac y la sueco-británica de AstraZeneca).
Único futbolista en haber ganado tres mundiales (Suecia-1958, Chile-1962, México-1970), Pelé ha estado aislado en su casa en el estado de Sao Paulo desde el inicio de la pandemia, que ya dejó más de 255.000 muertos en Brasil, una cifra solo superada por Estados Unidos.
Considerado por la Fifa como el mejor jugador de la historia, una distinción que comparte con el fallecido astro argentino Diego Maradona, el ídolo histórico del Santos hace parte de la población de mayor riesgo contra la nueva neumonía, que afecta con dureza a los mayores de 70 años.
La salud de Pelé se ha deteriorado en los últimos años. En algunas de sus limitadas apariciones, la mayoría para entrevistas o en videos publicados en sus redes sociales, se le ha visto en silla de ruedas o sosteniéndose en un apoyador.
La pandemia en Brasil vive una fase de recrudecimiento, con el sistema hospitalario al borde del colapso en muchos estados y retrasos en la campaña de vacunación, en medio de tensiones entre el presidente Jair Bolsonaro, que critica las medidas de confinamiento por su impacto económico, y los gobernadores.