El mundo de la música popular está envuelto en una tormenta de controversias desde el pasado martes, cuando el talentoso cantante cucuteño Ciro Quiñonez lanzó el esperado remix de su exitosa canción ‘Regalada Sales Cara’ junto con ‘Pipe’ Bueno, ‘Jessi’ Uribe y Luis Alfonso.
Aunque el remix prometía ser un hit, la atención se desvió rápidamente hacia las aguas turbulentas de la relación entre Ciro y su colega Giovanny Ayala.
‘Regalada Sales Cara’ es un himno en el repertorio de Quiñonez, quien la lanzó originalmente hace seis años en colaboración con Ayala.
Con más de 14 millones de visualizaciones en YouTube, la canción ha mantenido su relevancia a lo largo del tiempo, consolidándose como favorita de los fans.
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Sin embargo, la alegría del estreno del remix se vio empañada por la furia de Giovanny Ayala, quien acusó públicamente al artista nortesantandereano de excluirlo injustamente del proyecto.
El cantante argumentó que, como coautor original de la canción, merecía un lugar en el remix.
¿Qué dijo el cucuteño?
Ante las acusaciones del intérprete de ‘Se la robe y me la robaron’, Ciro decidió romper su silencio y dar su versión de los hechos en un video publicado en redes sociales.
Según Quiñonez, había estado tratando de convencer a Ayala para participar en el remix durante más de un año, pero sus esfuerzos fueron en vano.
Cuando finalmente logró reunir al elenco adecuado, Ayala puso una condición: la participación de su hijo Sebastián en el proyecto. Esta exigencia, según el cucuteño, complicó la inclusión de Ayala en el remix, ya que no había espacio para otro artista adicional.
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“Nunca recibí una respuesta positiva ni interés por el proyecto... Para mí era fundamental su presencia. En un momento de la conversación interrumpió todo y dijo: ‘yo estoy en el remix siempre y cuando esté mi hijo Sebastián. Si quieren que yo esté, es mi condición’”, contó en el video.
Ciro reveló que esa decisión fue consultada con su mánager y los otros cantantes que hicieron parte de la producción. “Él dice que por qué tengo que tener aprobación de ellos si la canción es de los dos. Dijo también: ‘ellos no deben opinar de esta canción, ellos deben saber que esa es mi exigencia porque yo soy el papá de los pollitos’”.
Según Quiñonez, no hubo espacio para incluir otro artista más. Al parecer, Alan Ramírez, Elder Dayan y ‘Álzate’ también querían estar en el remix, pero no fue posible.
La situación tomó un giro aún más controvertido, cuando Ayala afirmó que Ciro y su equipo de trabajo le habían solicitado dinero para participar en el video del remix, una acusación que Quiñonez negó rotundamente.
“En vez de pedirle plata a ellos que iban a participar me pidió plata a mí, la promoción es cansona, pero yo lo tomé de la mano para ayudarlo. Yo di la plata y cuando sale el tráiler estaban todos menos yo. Me clavó el puñal por detrás, desagradecido de miércoles.”, dijo Ayala, a través de sus redes sociales.
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Se sacaron los ‘trapitos al sol’
Pero la disputa no se detuvo ahí. Ayala hizo algunas revelaciones personales sobre Ciro, mencionando su proceso de injerto capilar y acusándolo de hipocresía por criticar los retoques estéticos cuando él mismo había pasado por procedimientos similares.
Estas acusaciones personales causaron un mayor revuelo en las redes sociales y dejaron a muchos seguidores atónitos.
Ante el escándalo, Ciro Quiñonez optó por un enfoque más conciliador, invitando a sus seguidores a dejar de lado las polémicas y centrarse en la música y el amor.
Reconoció la contribución de Ayala a la versión original de la canción y expresó su respeto y admiración por él, a pesar de las recientes disputas.
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En resumen, lo que comenzó como un emocionante lanzamiento musical, se convirtió en un drama público que reveló tensiones y resentimientos entre dos colegas de la industria musical.
Mientras los fans esperan que la tormenta se calme, queda claro que la historia detrás del remix de ‘Regalada Sales Cara’ es mucho más que una simple colaboración musical.
Es un recordatorio de que incluso en el mundo del entretenimiento, las relaciones personales y los egos pueden influir poderosamente en el curso de los eventos.
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