
Las elecciones parlamentarias en Alemania fueron ganadas por la Democracia Cristiana, seguida por la AfD (Alianza por Alemania), descrita por los medios progresistas, en tercer lugar, y con la mayor caída históricas, estuvo la gobernante socialdemocracia de Scholz, que perdió la confianza del pueblo alemán y por eso se llama a elecciones, los verdes (los ambientalistas de izquierda) quedaron de cuartos, reduciendo bastante su participación anterior y finalmente la que llaman los medios progres, izquierda, que es el partido comunista estalinista, ese si es de extrema izquierda; los tres izquierdistas eran la coalición de gobierno encabezada por Olaf Scholz.
Resumiendo, Alemania votó pidiendo un giro a la derecha, un regreso al desarrollo de la hoy recalentada locomotora industrial de Europa, debido a que otra Demócrata Cristiana, Angela Merkel sometió la independencia energética alemana a los hidrocarburos rusos y dejó su generación nuclear, siguiendo el discurso progres ambiental, en parte debido a la inmigración descontrolada, principalmente musulmana, que ha traído inseguridad a la tranquila Alemania, porque es una inmigración que no se asimila a su nuevo hogar sino que crea guetos, en muchos casos radicales, y en parte por abandonar el mundo woke que ha creado inestabilidad social.
Para llegar a la jefatura del gobierno, Friedrich Merz, cabeza de la Democracia Cristiana, quien llegó al cargo tras la caída del apoyo al socialdemócrata Olaf Scholz, defensor acérrimo de la gigantesca burocracia progresista de la Unión Europea y estandarte del progresismo junto con Naciones Unidas, deberá gobernar en coalición al no lograr la mayoría del Parlamento. Lo puede hacer lógicamente con la AfD, partido de derecha, segundo en la votación, pero también le alcanza en coalición con la izquierda socialdemócrata; traicionando a los votantes, lo hará con esto los que significará gobernar con ... Scholz, al que echaron del gobierno.
Eso se llama caer parado. Un cambio de 360 grados; seguimos como veníamos. Como pasó con el referendo de Santos, en Alemania también burlaron la voluntad popular con la excusa que nunca gobernaran con la extrema derecha, como el Nobel lo hizo en nombre de la Paz.
El modelo progresista tiene a Europa en una caída económica que adquiere visos de tragedia. Trabajando con datos públicos del Banco Mundial, este columnista observó cómo, con datos a 2023, la Unión Europea más el Reino Unido (UE+GB) que en el año 2000 tenían el mismo PIB que Estados Unidos, a 2023 el PIB de Estados Unidos era mayor en un 18%. Y la caída no fue peor gracias al crecimiento de países de Europa Central como Polonia, Irlanda y Finlandia que han seguido fervientemente la economía de mercado y rechazado el Progresismo.
El peso económico mundial relativo de la Unión Europea más Gran Bretaña es hoy mucho menor que en el inicio del siglo. En el año 2000 el PIB de China era solo del 20% del de la Unión Europea más Gran Bretaña, en 2023 el PIB de China ya era el 92% del de UE+GB; el PIB de India por su parte era en el 2000 solo el 6% de UE+GB, para en 2023 ya era del 44% e India crece mientras UE+GB se estancan.
El vicepresidente estadounidense J. D. Vance, a propósito de la presión que están haciendo los inmigrantes musulmanes sobre la seguridad en Reino Unido, dijo lapidariamente “Reino Unido será el primer país islamista en tener armamento nuclear”. Ahora UE+GB están amenazados de perder también la guerra civilizacional.
Y como la derecha “tradicional” es parte de ese progresismo, lo que veremos a futuro es el crecimiento exponencial de lo que la prensa y la burocracia de la UE+GB llaman ultraderecha. A menos que logren prohibirla que es la propuesta más reciente de la Progresista Unión Europea. ¿Estaremos viendo el triste final de una Europa decadente? Alemania tenía la respuesta y optó por profundizar el comportamiento dañino de mantener el ideologismo progresista apalancándose económicamente en crisis inflacionaria y de deuda.
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