Con la presencia del presidente Gustavo Petro y miembros de su gabinete ministerial, político y diplomático y la ausencia de Nicolás Maduro, el lunes 26 quedó oficialmente abierta la frontera entre Colombia y Venezuela, tras un cierre de siete años. Entre gritos y aplausos fueron acompañados los camiones cargados de medicamentos desde el lado colombiano y con acero desde el lado venezolano, que reiniciaron el paso por el puente internacional Simón Bolívar en Villa del Rosario.

Sin duda el flujo peatonal y comercial a ambos lados de la línea binacional mejorará significativamente la calidad de los habitantes de la frontera. Sin embargo, empresarios, comerciantes, ciudadanos y políticos de ambas naciones han recibido con altas expectativas y algunos temores esta reapertura fronteriza.

Entre las razones de estos temores están, entre otras, la no asistencia de Nicolás Maduro al evento, la suspensión del permiso de comercialización por parte de la entidad aérea del vecino país a la aerolínea venezolana Turpial , la cual no pudo viajar des de Caracas a Colombia, así como la suspensión del permiso de comercialización a la empresa colombiana Wingo. Por esta razón la reanudación de los vuelos entre ambos países no se ha podido realizar.  

El presidente Petro anunció su aspiración de un comercio binacional que llegue a los 4.000 millones de dólares anuales al final de su mandato, pero para pasar de los 300 millones de dólares actuales a la cifra anhelada se requiere la construcción de canales de confianza, como la garantía de los pagos.

En el campo nacional las expectativas están dirigidas a las modificaciones al proyecto de la reforma tributaria impulsada por el gobierno, liderado por el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, y que está en trámite en el Congreso de la República con un recaudo esperado de 25 billones de pesos en 2023.

Pero todo apunta a que luego de las discusiones y modificaciones acordadas el recaudo será inferior a los $25 billones esperados.

A nivel internacional las miradas están dirigidas a Ucrania ante la decisión   de Putin de anexar cuatro territorios ucranianos con una ceremonia   programada para el viernes 30. ¿Qué pasará?