Después de 13 años, Liga Nortesantandereana de Voleibol desarrolló un campamento que tuvo como objetivo analizar el funcionamiento físico de la rama femenina en las categorías 2008, 2009 y 2010, que contó con la participación del entrenador Enrique Bugallo Tellez, quien hace parte del cuerpo técnico de la Selección Colombia.
En el campamento estuvieron presentes los diferentes clubes de la ciudad con 48 deportistas que demostraron su rendimiento.
Según el entrenador Bugallo, estos espacios se realizan con el fin de empezar a proyectar a las jugadoras que integrarán la selección departamental de esta disciplina.
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“Esperamos en un futuro cercano volver a estar en los campeonatos nacionales de las diferentes categorías a los que no asistimos desde hace años. Hay material, pero falta trabajo. Uno entiende que es complicado volver a comenzar con los procesos luego de tanto tiempo”, sostuvo Bugallo, profesor de educación física en la Universidad de Pamplona.
Entre los análisis del entrenador, para retomar la Selección Norte de Santander de voleibol, se deberán mejorar los aspectos técnicos de las deportistas, y así mismo, su disciplina que es fundamental en el renacer de la liga.
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César Arias, presidente de la Liga Nortesantandereana de Voleibol, manifestó que en la iniciativa detectaron como están en técnicas de voleo, ataque, recepción, incluso en la talla y condición física.
”Debemos hacer mejor preparación física. Hubo niñas que se marearon, otras manifestaron dolores de rodilla, lo cual demuestra se debe hacer control de cargas para que no hayan lesiones a futuro”, resaltó Arias.
Por su parte, el entrenador Bugallo mencionó que una de las recomendaciones es capacitar a los entrenadores y monitores para que ellos tengan más técnica y sus jugadores también. “Ese trabajo es un conjunto interdisciplinario, que se debe hacer con énfasis en la técnica y disciplina”.
En años anteriores, la Selección Norte de Santander se definía por medio de campeonatos, sin tener en cuenta el estudio de las condiciones en las que se encontraban los deportistas, por eso, que se inicie nuevamente el proceso, se vuelve en un escenario favorable para el futuro de este deporte en la región.
Los retos para 2024
La liga rojinegra ha estado en un tiempo de pausa por más de 10 años, tiempo en el que se dejaron de ir a competencias nacionales convocadas por la Federación Colombiana de Voleibol.
En esa temporalidad, el Ministerio del Deporte hizo el retiro del reconocimiento como liga, aunque en los últimos años no se consiguió, se espera que para el próximo 2024 sea el primer logro que obtengan.
“Hace poco se escogió una nueva Junta para iniciar desde cero todo el proceso. Hace tres años el profesor Carlos Cote (expresidente) intentó reactivar la liga, pero no logró el reconocimiento ya que hubo unos problemas administrativos ante el Ministerio”, explicó Arias.
Arias añadió que están a la espera de que la Gobernación de Norte de Santander emita la resolución para enviar al Mindeporte la documentación necesaria para tener de vuelta el reconocimiento.
Según el presidente de la liga, después de obtenerlo, que es un primer un reto administrativo, iniciarán con el proceso técnico de los entrenamientos con Bugallo.
Arias agregó que esperan llegar a más municipios del departamento con la reactivación que están haciendo.
“Hay que hacer un proceso de masificación, solamente vinieron niñas de Cúcuta y un objetivo de esta liga es abarcar a todo Norte de Santander. Queremos poder ir a todos los municipios y detectar talentos”, enfatizó.
Añadió que, para hacerlo posible, deberán buscar las garantías, siendo fundamental las entidades como Indenorte, el IMRD y sectores empresariales.
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La falta de escenarios, una complicación
Aunque son muchas las proyecciones de cara al nuevo periodo, hay dificultades con las que deben enfrentarse para hacer realidad la Selección Norte de Santander como lo es la falta de escenarios deportivos.
En el campamento, una de las preocupaciones que encontraron fue la seguridad de los deportistas por la falta de escenarios para una práctica óptima, lo que representa un reto para este nuevo año desde lo administrativo y la preparación deportiva.
“Si no contamos con un piso adecuado, es probable que los deportistas se puedan lesionar más fácil”, alertó Arias.
Otra de las preocupaciones de los deportistas es si continuarán en el coliseo menor Eustorgio Colmenares, donde habitualmente entrenan y tienen el piso adecuado, ya que en el escenario confluyen otras cuatro disciplinas.
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