Durante cuatro días seguidos el corregimiento de Cornejo, perteneciente a San Cayetano, fue fiesta y celebración por las ferias, con presentaciones musicales, artísticas, demostraciones culturales y mucho más. Una antesala inesperada a la tragedia que se avecinaba.

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En la madrugada de ayer, 14 de julio, una vez finalizadas las fiestas, sus cientos de asistentes, que se habían trasladado desde diferentes sectores del departamento agarraron ruta para volver a casa. De ellos, tres nunca alcanzaron la meta, se trata de Carlos Soto Mora y los hermanos González, Camilo y Anabel.

Tras varios días de celebración, la fiesta se apagó pasada la medianoche de ayer, Camilo, Anabel y un tercero, identificado como Jhon Héctor Moreno Ortiz, emprendieron el rumbo en una motocicleta hacia El Zulia.

Desde dicho municipio, minutos más tarde, Soto tomó la misma ruta en sentido contrario, también en moto. El destino de las cuatro personas se juntó cuando ambos vehículos alcanzaron el sector La Trituradora, a unos cuantos metros del cementerio Las Piedras, donde se dio de frente el fatídico encuentro.

La carretera estaba más transitada de lo que sería una madrugada, pasadas las dos de la mañana, pero ayer era diferente, las ferias de Cornejo incrementaron el flujo vehicular y fue uno de los factores de la tragedia.

Pues una de las motos habría intentado adelantar a otro vehículo, invadiendo el carril contrario y generando la violenta colisión que los mandó a todos al asfalto. La escena era macabra, los cuatro cuerpos tendidos, las dos motocicletas con su parte frontal afectada, y marcas de sangre y gasolina, que remplazaban lo que en horas anteriores era espuma y maicena.

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Según información preliminar, en el momento del impacto, falleció Camilo inmediatamente, pronto se le unieron Anabel y Soto, quienes fallecieron ante la gravedad de las heridas, el único sobreviviente fue Jhon, quien quedó en estado crítico.

Pronto testigos del hecho y demás particulares que se movilizaban por el sector se detuvieron para auxiliar al herido. El joven fue trasladado de emergencia a un centro asistencial donde permanece recibiendo asistencia médica.

La trágica noticia rápidamente circuló por El Zulia, de donde serían oriundos los hermanos González, llenando de luto este municipio que hizo sentir su tristeza con mensajes y videos ante la tragedia.

Sin embargo, ante la situación de Jhon se han aferrado a la esperanza de que se mantenga con vida.

“Jhon Héctor, este es un partido más, y tú lo vas a ganar”, comentó una allegada, en referencia a su pasión por el fútbol, que también lo unía con Camilo.

Centro Zulia FC, el equipo de fútbol para el que juega Jhon, y lo acompañaba Camilo, emitió comunicados de luto, pero también de esperanza y colaboración “para un miembro más de la familia”.

El siniestro vial sigue siendo materia de investigación para las autoridades, que tratan de esclarecer exactamente las causas del accidente. Mientras tanto, la comunidad zuliana ha demostrado su luto ante los fallecimientos.

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Los hermanitos González

Anabel y Camilo eran reconocidos en El Zulia por ser muy cercanos e inseparables. Al igual que asistieron juntos a las ferias compartían todo tipo de aventuras, desde un paseo por el parque, hasta ir juntos a los partidos e incontables bailes.

“Deseo que encuentren el camino a la luz perpetua, los imagino caminando agarrados de la mano al paraíso”, publicó uno de sus allegados junto a una de las últimas fotos juntos que dejaron en vida, como un resumen de la situación, abrazados, después de un partido de fútbol, y de fondo, la motocicleta en la que se accidentaron.

Camilo era un joven que dedicaba su vida a su gran pasión: el balompié. Su rostro era sinónimo del dorsal número 15 que utilizaba para competir en campeonatos regionales. Este amor por el ‘Deporte Rey’ lo acompañó desde pequeño, incluso participando en torneos juveniles en diferentes ciudades del país.

Por su parte, Anabel se había graduado como administradora de empresas de la Universidad Francisco de Paula Santander en diciembre de 2023. Según sus propias palabras, su mascota, una perrita blanca, era su vida entera y el único motivo por el cual regresar a casa. “¿Ahora quién le explicará que su mamá humana no está?”, comentó un allegado en dicha publicación.

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