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Las urbanizaciones ilegales, una problemática social, económica y ambiental.
Cúcuta se ha caracterizado por su desarrollo a través de procesos de urbanización ilegal o informal.

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Las urbanizaciones ilegales, una problemática social, económica y ambiental.
Cúcuta se ha caracterizado por su desarrollo a través de procesos de urbanización ilegal o informal.
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Miércoles, 22 de Junio de 2022

Como muchas otras de las ciudades de Colombia y Latinoamérica, Cúcuta se ha caracterizado por su desarrollo a través de procesos de urbanización ilegal o informal.

Este proceso varia de intensidad y extensión, en unas ciudades más que en otras, pero en todos los casos se caracteriza por albergar población procedente principalmente de procesos migratorios del campo a la ciudad y en la última década, de procesos migratorios de extranjeros provenientes principalmente de Venezuela.

De esta manera,  las personas que viven en este tipo de urbanizaciones hacen parte de la población vulnerable que generalmente tiene un alto grado de pobreza y bajo nivel de escolaridad, y gracias a que estas urbanizaciones ilegales son la única alternativa accesible para resolver su necesidad de vivienda, existen urbanizadores ilegales que se dedican a “urbanizar” y vender lotes y viviendas que no cumplen con la normatividad urbanística, legal ni ambiental y someten a los habitantes a vivir en bajos estándares urbanos y sociales.


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Uno de los casos más reconocidos en el país es el de la banda “Los Tierreros en Bogotá”, que según datos de la fiscalía, en el 2012 fueron capturados y llevados a juicio 18 de sus integrantes por estafar a 400 personas mediante la venta de lotes que previamente habían sido invadidos, cuyo monto que ascendía a $46.700 millones de pesos (Fiscalía General de la Nación, 2014).

Cúcuta no es la excepción, según datos del Departamento Administrativo de Planeación, para el año 2020 Cúcuta contaba con un total de 436 barrios en las 10 comunas, de los cuales 114 son asentamientos ilegales (barrios consolidados) y 55 asentamientos precarios ilegales; esto indica que aproximadamente el 40% de los barrios en la ciudad mantienen la condición de urbanización ilegal. 

A continuación, veremos algunos impactos de las urbanizaciones ilegales en el desarrollo de la ciudad

Desde el punto de vista social, las familias asentadas no gozan de un espacio adecuado y confortable para su desarrollo y no nos referimos a las viviendas per se, si no a la falta de acceso a los servicios públicos y vías pavimentadas, a las dotaciones requeridas como colegios, centros de salud, estaciones de policía y finalmente, al espacio público adecuado para el sano esparcimiento, como zonas verdes, plazas, parques y alamedas.


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Esto por un lado acentúa la desigualdad e incrementa las brechas entre clases sociales, y por otro lado, dificulta el desarrollo de procesos culturales y de seguridad en la apropiación del espacio público por parte de sus habitantes. Convirtiéndose en terreno fértil para la delincuencia entre los jóvenes.

A nivel ambiental normalmente las urbanizaciones ilegales se desarrollan en terrenos inestables de alta pendiente, lo que implica que tienen procesos activos de remoción en masa, o en suelos destinados a la protección ambiental de cuerpos hídricos (cauces, humedales, meandros, etc.), que son susceptibles de inundaciones.

Durante el proceso de invasión no se contempla el cumplimiento de ningún tipo de normatividad ambiental, aumentando el impacto e incluso depredando las especies vegetales y animales, sin un correcto manejo de cauces naturales etc. Por otro lado, dado que no se construye infraestructura de servicios públicos, la disposición de las aguas residuales (negras) se realiza a cielo abierto sobre quebradas o canales naturales o artificiales, causando un impacto en el medio ambiente y generando problemas de salubridad en general.


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Y desde el punto de vista económico, el panorama no es mejor, si bien es cierto que la urbanización ilegal se constituye como solución de vivienda para la población de bajos recursos, en mi opinión es el punto de partida de una bola de nieve; pues en primer lugar su conformación se realiza por fuera del sistema económico, no genera empleos formales ni una mayor inversión de recursos, y en segundo lugar, las familias no pagan impuestos prediales, pues no son propietarios legítimos del terreno.

Lo que finalmente se traduce en la disminución del recaudo municipal, y en el gasto en que el municipio debe incurrir y disponer los recursos para construir los proyectos de la infraestructura vial, dotación y redes de servicios públicos, y la construcción y dotación del espacio público, que en una urbanización legal estarían a cargo del constructor.

En conclusión, para resolver uno de los problemas más básicos y apremiantes de nuestra sociedad, se debe disponer de un sistema integral que contemple y promueva las condiciones de acceso a vivienda legal y económica, control territorial urbano  para evitar la expansión de asentamientos informales a través de mafias dedicadas a su desarrollo y un trabajo mancomunado de entidades gubernamentales regionales y locales (ambientales y de ordenamiento), que permitan planear y ejecutar de forma ágil y oportuna  proyectos a gran escala que impulsen el desarrollo urbanístico ordenado y de calidad, de manera que se promueva al desarrollo de la sociedad, al mismo tiempo que se protege el medio ambiente.

Por Hugo Espinosa-Ing. Civil

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Para desarrollar el estudio, Experian encuestó a más de 6.000 consumidores y casi 1.900 empresas de 20 países.
AFP
AFP

Las transacciones financieras digitales se han convertido en moneda corriente en los últimos años y han generado consumidores entendidos con una conciencia mayor sobre el fraude y la función que las herramientas de identificación y seguridad cumplen para protegerlos.

El Informe anual global sobre identidad y fraude de Experian reveló que más de la mitad de los consumidores encuestados en todo el mundo han sido víctimas de un fraude o conocen a alguien que lo ha sido, y que para ellos el robo de la identidad ha sobrepasado al robo de datos de la tarjeta de crédito como preocupación principal.

A pesar de estas inquietudes, la mayoría de los consumidores encuestados afirma que su actividad en línea aumentará en los próximos tres meses.

“Los delincuentes buscan constantemente el camino que ofrezca menos resistencia, y para combatir contra ello las organizaciones deben ser igualmente agresivas en el uso de los datos como defensa, al priorizar las inversiones en la detección y prevención del fraude y probar a los clientes que su seguridad es fundamental”, indicó Eric Haller, vicepresidente ejecutivo y gerente general global de Identidad y Fraude de Experian.

Los consumidores de todo el mundo valoran la seguridad en su experiencia en línea por sobre otros factores.


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Las entrevistas realizadas a los participantes revelaron que, para muchas personas, equilibrar la necesidad de seguridad con la practicidad de las transacciones en línea se reduce a en qué empresas confían.

Comercio digital

Los proveedores de sistemas de pago, las empresas de tarjetas de crédito, los proveedores de tecnología y los servicios de streaming son las empresas en las que los consumidores más confían en lo que respecta a cuestiones de seguridad en línea.

Los consumidores también expresaron que, independientemente del tamaño de la empresa, si una marca proporciona experiencias digitales positivas sistemáticamente, confiarán en que la organización está protegiendo sus datos.

Más resultados

Así mismo el 57% de los consumidores declara estar dispuesto a compartir datos si eso garantiza más seguridad o evita el fraude, y espera que las empresas los protejan a cambio.

Casi el 75 % de los consumidores espera que las empresas tomen las medidas de seguridad necesarias para protegerlos en línea.


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Este hecho no es sorprendente para las empresas, ya que la mayoría espera que los consumidores mencionen la seguridad como una prioridad principal. Además, independientemente de la inversión de la empresa, el 70 % de las empresas afirman que prevenir el fraude es su preocupación principal: la cifra más alta hasta ahora.

La investigación indica que todavía existe una brecha considerable entre la opinión de los consumidores y las intenciones de las empresas en cuanto al reconocimiento de la identidad. Solo un tercio de los consumidores confían en que las empresas reconocerán su identidad repetidamente en línea, aunque el 84 % dice que reconocer a los clientes es muy o sumamente importante.

Y no hay líderes indiscutibles en términos de qué método de identificación y seguridad prefieren los consumidores; el reconocimiento físico biométrico y el envío de códigos PIN a los dispositivos ocupan los dos primeros lugares.

Comercio digital

Otros hallazgos han dejado al descubierto son lo siguiente:

  • El 77 % de los consumidores afirman que su preocupación aumentó luego de experimentar un incidente de fraude en línea; esta preocupación fue más alta en Colombia, Perú y Brasil.
  • El 83 % de los consumidores dicen que la seguridad es el factor más importante en la experiencia en línea. Esa cifra es más alta (89 %) en Colombia, Chile, Irlanda y Sudáfrica.
  • El 95 % de los pertenecientes a la generación del baby boom menciona la seguridad como el aspecto más importante de su experiencia en línea, 10 puntos porcentuales más que sus homólogos de la generación Z.
  • Los pertenecientes a la generación del baby boom se sienten más seguros con el reconocimiento físico biométrico, más que sus homólogos más jóvenes (personas de 18 a 25 años). También confían más en la biométrica del comportamiento.
  • Las empresas dicen que mejorar la experiencia digital del cliente es primordial; el porcentaje más alto (más del 90 %) se da en Indonesia, India, Brasil, Chile, EE. UU. e Irlanda.
  • Solo 1 de cada 5 consumidores declara que le han ofrecido una opción de formulario prellenado como parte de su experiencia digital de apertura de una cuenta.

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