Tener la posibilidad de ayudar a alguien a cumplir un sueño es una tarea que requiere de mucho conocimiento y compromiso, sobre todo si ese sueño está atado a su vez a una inversión de largo plazo y al andamiaje de varios factores sociales y económicos. A eso se dedican los agentes inmobiliarios: a entender las necesidades y expectativas específicas de los clientes y a encontrar los hogares que serían perfectos para ellos y sus familias.
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Los agentes que trabajan en el campo de las Proptech (y particularmente en Home Capital Outlet de Vivienda), dada la naturaleza del sector, tienen además la posibilidad de hacer un mayor uso de la tecnología y por tanto contar con mejores herramientas para cumplir con el propósito de facilitar y mejorar el acceso a la vivienda de las familias de clase media. Esto les permite tener la trazabilidad de los inmuebles que se ofertan, cerrar brechas de adquisición, simplificar las transacciones y generar ahorros a quienes están haciendo la compra, entre otros.
¿Y cómo pasa eso? La tecnología, en este caso, ha permitido grandes avances, entre ellos eliminar las asimetrías de información en el mercado (recordemos que mucha de la información en referencia al sector inmobiliario no es pública), pues a través de soluciones de geolocalización, big data y machine learning, los agentes del sector Proptech pueden cruzar la información de venta de bienes similares a los que están transando y a partir de ello establecer precios reales, contrarrestando los estimados sobre los que se suele trabajar.
Adicionalmente, el constante cruce de información de oferta y demanda permite contar con un conocimiento más profundo de las tendencias y los comportamientos del sector, permitiendo que se tomen decisiones informadas y por tanto mucho más beneficiosas para las partes involucradas.
A lo anterior se suman otros beneficios consecuencia de la implementación tecnológica, como la rapidez de los procesos, la mayor y mejor rotación del mercado, el aumento de la confianza en el sector, la transparencia, la inclusión financiera y la seguridad en las diferentes etapas.
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El impacto real de este modelo es contundente: para el caso de Home Capital Outlet de Vivienda, en el primer semestre del año se impactó a 795 familias (80% de ellas pertenecientes a niveles socioeconómicos 2 y 3) a quienes se les generó ahorros de $18 mil millones. Se vendieron 306 propiedades por $73 mil millones, se compraron 489 por más de $95 mil millones y el 72% del inventario tiene una proyección de venta de menos de 90 días.
Ahora bien, mientras los avances mencionados anteriormente han permitido mejorar la experiencia de los clientes en la decisión de compra, aún hace falta fortalecer con mayor tecnología otros procesos que son clave para la adquisición de vivienda, como lo concerniente a los trámites de registros, escrituras, levantamiento de hipotecas e incluso con la búsqueda de financiación y los tiempos y trámites del sector financiero en referencia con la adquisición de vivienda.
A futuro, es un hecho que los beneficios para los compradores y la dinamización del sector seguirán incrementándose de la mano de los avances tecnológicos y que los agentes del sector Proptech tendrán cada vez más herramientas como la realidad aumentada, la realidad virtual, el blockchain y los avances de la inteligencia artificial, a los que además se sumarán tendencias como el metaverso, y todo ello permitirá que las decisiones de compra de vivienda de las familias se hagan con información profunda, con proyecciones claras y con experiencias que facilitarán los procesos en todo sentido.
