El 23 de septiembre de 2025, un video publicado en el perfil oficial de Beéle encendió las plataformas digitales en Colombia y más allá. En las imágenes, el joven cantante barranquillero aparece junto a Shakira, bailando la emblemática cumbia “Currucuchú”, un clásico del folclor costeño asociado al legado de La Niña Emilia y al Carnaval de Barranquilla.

Aunque se trataba de un breve registro audiovisual grabado en un ambiente profesional y cargado de estética caribeña, bastó para que se desataran especulaciones sobre una posible colaboración musical entre ambos intérpretes. La expectativa, sin embargo, se mezcló rápidamente con una ola de críticas hacia la artista internacional.

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Reacciones divididas en redes sociales por el video de Beéle y Shakira

El entusiasmo inicial por ver a Shakira compartir escena con uno de los talentos emergentes de la música urbana pronto se vio opacado por comentarios de desaprobación. Numerosos usuarios cuestionaron a la barranquillera por vincularse con Beéle, cuya vida personal y profesional ha estado rodeada de controversia.

Las críticas apuntaron, sobre todo, a las acusaciones de infidelidad y conflictos laborales ventilados por Camila Rodríguez, exnovia y exmánager del cantante, así como al reciente escándalo por un video íntimo junto a la influencer Isabella Ladera.

“Se me cayó una ídola”, “Qué bajo ha caído Shaki”, “Se juntaron los cachos y la cachona” y “Lo más random” fueron algunas de las frases más repetidas en foros y muros digitales, donde muchos interpretaron el baile como un gesto de respaldo a Beéle pese a su historial de polémicas.

¿Colaboración de Beéle y Shakira en camino?

Hasta ahora, ni Shakira ni Beéle han confirmado si el encuentro corresponde a un proyecto musical conjunto o si se trató de un simple guiño a la tradición caribeña. Lo cierto es que el video volvió a poner a Beéle en el foco mediático.

El artista barranquillero, de apenas 22 años, ha construido una carrera que lo ha llevado a colaborar con figuras como Quevedo y Nicky Jam, consolidándose en la escena urbana latina. Su estilo mezcla reggae, dancehall y sonidos caribeños, lo que lo ha convertido en una de las voces jóvenes más reconocidas del país.

No obstante, su ascenso ha estado marcado por tensiones personales. Rodríguez, quien lo acompañó en sus inicios como corista y representante, aseguró en varias entrevistas que fue clave en la proyección de su carrera y que, pese a ese apoyo, terminó afectada por la relación sentimental y los conflictos que surgieron en paralelo a su éxito. 

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