El consumo excesivo de alcohol no solo puede ser perjudicial para la salud, a largo plazo, también puede desencadenar problemas sociales, familiares y personales, ya que, al estar bajo sus efectos no se es consiente de los comportamientos que se tienen frente a las demás personas.

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Según lo describe la Organización Mundial de la Salud (OMS), el alcoholismo es una enfermedad progresiva, incurable y mortal, e igual que cualquier otra droga, su consumo excesivo genera problemas tanto físicos como mentales.

En Colombia, uno de los escándalos más recientes lo protagonizó en Cartagena el senador Álex Flórez, donde insultó a un policía en estado de embriaguez. Posteriormente, el político reconoció tener problemas de alcoholismo y aseguró estar recibiendo un tratamiento sicológico para lograr mantenerse sobrio.

En diálogo con La Opinión, Adriana Sofía Silva Silvia, sicóloga con magíster en Psicología y subdirectora nacional de Campo Psicología y Familias-Colpsic(Colegio Colombiano de Psicólogos) contestó algunos interrogantes que se forman a partir de esta problemática. 

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¿Cómo el consumo de alcohol afecta el estado de ánimo? 

En nuestra sociedad, el alcohol se ve como una forma de socializar. Consumimos estas bebidas en reuniones, celebraciones familiares y de amigos, incluso en fiestas infantiles, muchas veces se implementa para olvidar un problema, en fin, validamos ampliamente su consumo. 

Es importante recordar que estas bebidas son sustancias psicoactivas con capacidad para generar dependencia, que actúa como depresora del sistema nervioso central, por lo tanto, genera alteraciones en los circuitos cognitivos que regulan los pensamientos, las emociones y el comportamiento. 

Por consiguiente, el consumo de alcohol tiene un impacto en la salud física, mental, relacional, laboral, familiar, social. 
En cuanto a los cambios en los estados de ánimo, varían según la edad, el contexto, el tipo de bebida, sin embargo, el alcohol nos afecta en mayor o menor medida a todos, tanto hombres como mujeres. 

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¿Por qué causa placer?

Lo cierto es que la ingestión de alcohol, al principio tiene unos efectos placenteros como resultado de un aumento de los niveles de dopamina y de opioides endógenos en las vías de recompensa del cerebro, pero posteriormente aparecen los problemas.

También afecta directamente otros neurotransmisores, como la serotonina, que es la principal responsable de la regulación del estado de ánimo. 

¿Qué efectos provoca el uso del alcohol en la salud mental?

Entre las muchas sensaciones subjetivas que provoca el consumo de alcohol está la percepción de ser superior o de sentirse más atractivos, para algunos el alcohol es un desinhibidor sexual. 

Por otro lado, algunas personas dicen sentir un aumento de la agresividad o un impulso de decir aquello que no ha podido decir estando sobrio.

En cuanto a los efectos físicos, una alcoholemia superior al 0,10% provoca mareo, sedación, problemas de equilibrio y visión borrosa, confusión, dificultad para hablar, tambaleo, mareos y vómitos.
Igualmente, encontramos que el consumo de alcohol se convierte en un factor de riesgo para que se presenten eventos de violencia intrafamiliar.

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¿Por qué se producen ‘lagunas’ después de una borrachera? 

Las lagunas mentales relacionadas con el consumo de alcohol suceden cuando se bebe suficiente licor para bloquear temporalmente el paso de los recuerdos de la memoria a corto plazo a la memoria a largo plazo, es decir, afecta el funcionamiento normal del hipocampo, que es la región del cerebro asociado a la consolidación de los recuerdos, es como un bloqueo en la carretera que lleva un suceso a almacenarlo como recuerdo, cualquier persona que haya consumido alcohol en ciertas proporciones, puede experimentarlo.

Podemos ver a la persona que interactúa con otros de forma fluida, pero es incapaz de retener esos recuerdos. 

Las lagunas mentales suelen ser transitorias, pero pueden ser un factor de riesgo, para conductas impulsivas, bajo rendimiento laboral y/o académico, problemas con la ley por conducir en estado de alicoramiento o por conductas violentas o sufrir algún accidente.

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¿El alcohol puede influir en el actuar de las personas?

Recordemos que el alcohol es una sustancia psicoactiva, por lo que afecta procesos cognitivos tan importantes como el control de impulsos, la memoria y otros como la atención, toma de decisiones, orientación y la percepción, que terminan influyendo en la conducta.  

¿Cuándo es que tomar alcohol se convierte en un problema?

Se convierte en un problema cuando hay una disminución en la capacidad para controlar su consumo y a su vez afectan varios aspectos de la vida, no solo en lo físico, sino en lo relacional, es decir, cuando este genera dificultades para adaptarse a la sociedad. 

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¿Cuándo se debe buscar ayuda?

Es importante que cada uno aprenda a preguntarse, cuándo y cómo el alcohol influye en el estado de ánimo y si otros también se han visto afectados.

Hay personas que tienen una tendencia a ciertos efectos negativos del consumo de alcohol, cuando la salud física se está viendo afectada y siente que ya el cuerpo no puede funcionar sin alcohol y necesita aumentar su ingesta diariamente, cuando experimenta constantes problemas con los demás o cuando las personas cercanas a su circulo social tienden a enfatizar en repetidas ocasiones que se necesita la ayuda de un experto.

Si se experimenta algo de lo anterior, es importante contactar con un profesional de la salud, como un médico o un psicólogo especialista en adicciones.

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¿Cumple con alguno de estos criterios?

Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, donde se encuentran los trastornos por consumo de sustancias y para diagnosticar el trastorno por consumo como el alcohol,  se deben cumplir dos criterios de los siguientes, durante 12 meses, para considerarse una adicción
• Uso peligroso.
• Problemas sociales/interpersonales relacionados con el consumo. 
• Incumplimiento de los principales roles por su consumo. 
• Problemas legales. 
• Síndrome de abstinencia.
• Tolerancia, uso de mayor cantidad de sustancia o más tiempo. 
• Intentos repetidos de dejarlo/controlar el consumo. 
• Mucho más tiempo del que pensaba. 
• Problemas físicos/sicológicos relacionados con el consumo. 
• Deja de hacer otras actividades debido al consumo. 
• Craving (síntomas físicos y mentales que aparecen después de suspender o reducir el consumo de una droga- abstinencia).

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