Al menos 40.000 billones de pesos, de un total de 180 mil, ya se habrían perdido en Norte de Santander por cuenta de presuntos “elefantes blancos”. Así lo afirmó Daniel Briceño, abogado y activista anticorrupción, quien se encuentra trabajando en un estudio para exponer esas obras que se han convertido en monumentos a la corrupción, o están en riesgo de serlo, y por las cuales la nación ha perdido poco más de 9 billones de pesos en los últimos 15 años.
“Para la elaboración de este registro consultamos diferentes fuentes y una de ellas es la Contraloría General de la República”, señaló Briceño, quien destaca que el fin último de este trabajo de veeduría es buscar responsables, jurídicos, fiscales y políticos.
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Explicó que la esencia de su ejercicio es denunciar, poner en evidencia los casos y hacerles seguimiento, “esa plata ya se perdió y como ya no se puede recuperar, pues hay que buscar a los responsables”, dijo.
“Creo que es importante que la gente conozca cuánta plata se ha perdido, que pueda identificar quién es el responsable político y sobre todo que los órganos de control puedan actuar”, sostuvo.
El panorama de Norte de Santander
De la información recopilada sobre los dineros devorados por los “elefantes blancos”, Briceño señaló que “en Norte de Santander vamos en 181 mil millones de pesos, de los cuales ya la Contraloría dijo que definitivamente 40.000 millones de pesos se perdieron, por problemas de tipo financieros, de estructuración, legales y jurídicos”.
El monto comprometido corresponde, según la investigación de Briceño, a 23 proyectos repartidos en todo el departamento, donde Cúcuta aparece con seis proyectos por el orden de 40.000 millones de pesos; luego está Tibú, con cinco proyectos por 21.000 millones de pesos, Herrán con 3 mil millones y Gramalote con 20 mil millones de pesos.
“Hay que decir que estos proyectos no involucran solo recursos de la administración municipal o departamental, sino que también hay proyectos en que se comprometen recursos del Gobierno Nacional, del Fondo de Adaptación, de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, de convenios a nivel nacional y demás, pero son obras que están situadas aquí, en Norte de Santander”, sostuvo.
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Uno de los casos más emblemáticos a los que refirió Briceño en su inventario de “elefantes blancos” en el departamento, es el proyecto de mejoramiento del separador de la Avenida Los Libertadores en El Malecón.
Según Briceño, de acuerdo con datos de la Contraloría, “ya se habrían perdido 8.000 millones de pesos, independientemente las adiciones, las prórrogas y lo que se haga después, ya se les echó tierra”, sostuvo.
Otros proyectos que estarían bajo la lupa son: la reconstrucción del nuevo Casco Urbano de Gramalote (20.831 millones de pesos), proyecto del cual el secretario de Transparencia de la Presidencia de la República, Andrés Idárraga dijo no conocer nada cuando La Opinión le consultó en su reciente visita a Cúcuta. Asímismo, la infraestructura vial en áreas de influencia del Oleoducto Caño Limón Coveñas (14.133 millones de pesos).