Vecinos de las veredas El Molino y Puerto Rico, en el municipio Villa Caro, planean tomarse acciones de calle para exigir que el Gobierno departamental y municipal que atienda la situación de riesgo en que se encuentran más de 70 familias por el proceso de remoción en masa que comenzó el 10 de noviembre del año pasado.
Ese día, ocurrió una tragedia por el deslizamiento de unos 200 metros de tierra en la finca Flandes que sepultó varias viviendas, cobrando la vida de cinco miembros de una familia.
Cuatro meses después, quienes quedaron damnificados y otros pobladores que permanecen en las zonas de alto riesgo afirman que no han recibido ningún tipo de ayuda por parte de los gobernantes. Ellos temen que con la llegada de la ola invernal la emergencia crezca y pueda ocurrir una nueva emergencia, debido al represamiento de agua que se formó en la parte alta por el proceso de remoción de masa.
Jesús Vergel, damnificado de Villa Caro, indicó que tuvo que irse a vivir en la casa de sus padres mientras esperaban alguna solución o un subsidio de arriendo.
“El Gobierno nos prometió que nos iban a pagar un arriendo y que iban a sacar el agua porque en lo más alto se formó una laguna que está a punto de reventar”, declaró.
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Por su parte, Giovanni Becerra, también habitante de Villa Caro, contó que su madre tiene una propiedad cerca de la zona de riesgo, a unos metros de la vereda Puerto Rico y existe un gran temor por las consecuencias que pueda traer el inicio de la temporada de lluvias. Recordó que en noviembre pasado, la comunidad organizó un bloqueo de vías para pedir que la situación de emergencia fuera atendida porque producto de la avalancha hubo un taponamiento de la quebrada.
En esa ocasión, el Gobierno departamental se comprometió a evaluar las condiciones del proceso de remoción de masa con geólogos para establecer el tratamiento que le darían, dijo.
“En esos días mandaron geólogos, vino un señor con un dron para hacer una inspección en la zona de desastre y esos fueron puros pañitos de agua tibia, nunca más volvieron por acá”, manifestó.
El vocero comentó que cuando finalizaron las lluvias no se tomaron las medidas necesarias para atender el represamiento de agua y ahora que llegó la ola invernal, de nuevo están al borde de una emergencia.
Aseguró que son alrededor de 150 personas, entre damnificados y los que tienen sus casas cerca del río, las perjudicadas porque se están presentando deslizamientos de tierra que han taponado vías y amenazas los cultivos.
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Es importante recordar que cuando se produjo el proceso de remoción de masa, la Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastre informó que 70 familias de Villa Caro y Ábrego habían sido reubicadas.
Anuncian cierres
Los vecinos de Villa Caro anunciaron que de no recibir respuesta harán una protesta con cierre de la vía que comunica Ocaña con Cúcuta.
La comunidad de Villa Caro pide que se drene la laguna que se formó producto de las lluvias, pues temen que el agua pueda buscar salida, llevándose todo a su paso.
Piden además que se lleve maquina amarilla para atender los derrumbes que se producen cuando llueve y que impiden que las personas puedan transitar y sacar los cultivos.
Además, esperan que se les dé un subsidio de arriendo a las familias que perdieron sus viviendas. “Estas familias fueron abandonadas, nadie ha puesto la mano en la zona afectada y para los damnificados la atención ha sido nula”, declaró Becerra.
No ha sido posible
La Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo informó que han hecho monitoreo y seguimiento a la emergencia.
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El tema de las atenciones a las zonas afectadas por la ola invernal, entre ellas la de Villa Caro, fue tratado ayer en una reunión que se llevó a cabo en la Gobernación.
Carlos Daniel Serrano, alcalde de Villa Caro, indicó que la tarde de ayer tendría una reunión con la comunidad para escuchar sus peticiones, aunque la atención de la laguna que se formó en la parte alta de la vereda El Molino obedece al dictamen de los geólogos.
Explicó que a las familias damnificadas les brindaron atención cuando hubo la emergencia, pero no les prometieron subsidios o reubicaciones porque, entre otras cosas, ni siquiera ha sido posible incluirlas en la plataforma de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo.
Informó que por el momento, tienen previsto llevar maquinaria a la zona para despejar las vías que se hayan podido ver afectadas por el inicio de la temporada de lluvias.
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