Producto de las condiciones climatológicas de Norte de Santander, por donde atraviesa la cordillera Oriental de Los Andes, cada vez que la temporada de lluvias llega los habitantes del departamento, sobre todo de los pueblos de occidente, temen que crecidas súbitas de los ríos y deslizamientos acaben con sus casas, cultivos o hasta sus vidas.
Lea también: Lluvias causan estragos en veredas de Arboledas y Cucutilla
Las fuertes precipitaciones del pasado lunes afectaron de manera directa a siete municipios en Norte de Santander, siendo Arboledas el más afectado.
Al cierre de esta edición, el alcalde de ese municipio, Álvaro Carrillo reportó a La Opinión un balance de 18 viviendas, aproximadamente, que estaban afectadas y tuvieron que ser evacuadas por los daños que causó la fuerte avalancha.
Arboledas
La tarde del lunes 3 de junio llegó con un fuerte aguacero, que rápidamente se convirtió en una avalancha que acabó con todo a su paso. Desde casas hasta carreteras, dejando distintas partes del municipio incomunicadas.
“Desde la parte alta de la montaña se ve como un derrumbe que tal vez represó la quebrada y cuando eso se vino causó estragos, porque se vino con madera y todo. Estoy precisamente con el secretario de riesgos departamental y estamos haciendo una evaluación sobre el paso por el puente que conduce de Arboledas a Cucutilla”, informó Carrillo.
El alcalde de este municipio ordenó suspender el paso en el puente Julio, que es el que comunica Cucutilla con Arboledas, debido a que las fuertes lluvias afectaron la estructura.
Le puede interesar: Se cayó Puente Real en Chitagá: el fin de 283 años de historia a nivel nacional
“Desde anoche (lunes) el paso está cerrado para carros y motos. Solo hay paso peatonal. Los buses están haciendo trasbordo allí”, explicó a este medio uno de los habitantes de Cucutilla.
De acuerdo con el alcalde de Arboledas, en este momento están haciendo los estudios pertinentes para determinar si es viable reabrir este puente o si definitivamente hay que cerrarlo por temas de seguridad.
La crecida del río Zulia afectó 18 casas que, al día de hoy, están completamente inhabitables.
“Aproximadamente 18 viviendas en el corregimiento de Castro fueron afectadas. No se pueden usar. Ya sacamos las personas para pagarles arriendo”, manifestó, Álvaro Carrillo, alcalde de Arboledas.
Entérese: Un sacerdote fue asesinado en un parqueadero de Ocaña
Así también, manifestó que alrededor de 10 puentes tipo hamacas que comunicaban veredas de ese municipio fueron completamente destruidos por la crecida, lo cual afectó a las familias que ahora no se pueden mover.
“Para estudiar, los jóvenes se movilizaban por ahí. Hoy se suspendieron las clases para estudiar cómo se buscan soluciones. Hay familias del otro lado del río que no se pueden mover. Vamos a hacer una reunión e inicialmente haremos vías provisionales, porque esperar hacer puentes se tienen que hablar de tres o cuatro meses”, contó Carrillo.
Por otra parte, el presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda San José de Castro, que fue el sitio más afectado de todo el departamento, pidió a las autoridades gubernamentales su presencia en el lugar con ayudas.
“La noche fue mortal, porque estábamos a la zozobra. Les pedimos a las entidades gubernamentales que nos colaboren y que nos tengan en cuenta, porque realmente fue pérdida total en muchos lados. Esto jamás había pasado”, aseveró Ricardo Moreno, presidente de la JAC de San José de Castro.
Otros municipios
Los otros municipios que también sufrieron daños fueron Cucutilla, Ocaña, Toledo, Chitagá, El Carmen y Ábrego.
En ese último municipio, que por cierto fue donde ocurrió la tragedia de El Tarrita hace un año, fuertes vientos acompañados de granizo destrozaron los cultivos de cebolla, maíz, tomate, plátano, pepino, habichuela y tabaco de varios campesinos de la zona.
Lea aquí: Asesinaron a un hombre en el barrio Los Caobos de Cúcuta
“Después del fuerte verano, viene la lluvia y causa estragos porque lo perdimos todo. Tenemos deudas en las entidades bancarias y no gozamos del seguro de cosecha”, indicó un campesino de Ábrego, Fabio Gómez Ascanio.
En Ocaña también se afectó una vivienda y dejó sin servicios públicos a varias zonas del municipio. El coordinador de la oficina de Gestión del Riesgo y Atención de Desastres de Ocaña, Gustavo Adolfo Paba, indicó que está vigente la alerta amarilla para alistamiento y mitigar las emergencias.
Informó sobre el colapso estructural de una parte de un techo y una paredilla de una vivienda de tapia pisada ubicada en el sector de La Floresta del corregimiento de Aguas Claras, donde sólo se reportaron daños materiales.
En Chitagá, por otro lado, la Gobernación de Norte de Santander informó que hubo “deslizamiento de banca posiblemente provocado por las lluvias en el sector mina El Silencio, vereda San Carlos, corregimiento San Luis de Chucarima”.
Asimismo, la crecida del río en ese municipio se llevó el Puente Real, un Bien de Interés Cultural de Carácter Nacional.
El histórico puente fue construido a mediados del siglo XVIII, siendo el escenario de la batalla de los Mil Días y el lugar por donde pasó el libertador Simón Bolívar en 1820.
Puente Real fue declarado como Bien de Interés Cultural de Carácter Nacional de acuerdo a la Resolución 0109 de 2005, debido a su importante valor histórico.
“La solución de Puente Real es que viene una intervención que se debió de hacer hace más de 12 años y no se hizo. Tal vez la forma inoperante de gestionar esta necesidad no se logró hacer. Lastimosamente el puente ya colapsó. Vamos a tratar de desmontar el restante y hacer un inventario, con o sin permiso del Ministerio de Cultura”, explicó el acalde de Chitagá, Yorman Suárez.
Se trata de una de las estructuras de madera más antiguas que tenía Norte de Santander, ya que era utilizado por los viajeros como un paso obligatorio.
En Toledo también hubo grandes afectaciones en una bancada del municipio que dejó incomunicadas a varias veredas.
También es noticia: Otra decepción: Cúcuta Deportivo fue derrotado por Quindío en Armenia
Reporte del Ideam
De acuerdo con el reporte del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), varios municipios de Norte de Santander están en alerta roja por las fuertes precipitaciones, que también trae pronósticos de amenaza por deslizamientos de tierra.
Entre los municipios que más preocupan en las proyecciones del Ideam están Chitagá y Toledo, pero también los que conforman el Catatumbo.
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion