Una estrategia encaminada a la transformación social promueve los firmantes de los acuerdos de paz con la implementación de biofábricas para la seguridad alimentaria de las especies menores en la zona del Catatumbo.
Con 70 asociados los campesinos consolidan la iniciativa de producción agropecuaria con el fin de mejorar las condiciones de vida de los habitantes con proyectos alternativos y así alejarse de los cultivos ilícitos de la región.
La fundación Paso Colombia lidera junto con la ONU, la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña y la Agencia de Reincorporación y Normalización (ARN) la Red de Paz del Catatumbo, mecanismos con los firmantes de paz y las comunidades campesinas de Norte de Santander.
En las biofábricas producen artesanalmente alimentos para animales donde los productos son vendidos a los integrantes de la red y otras familias campesinas, quienes se benefician de precios más económicos y amigables ambientalmente, señala la Lorena Corvera Villamizar, coordinadora de la ARN Norte de Santander.
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La Red de Paz del Catatumbo agrupa siete formas asociativas de personas en proceso de reincorporación y cooperativas campesinas donde se busca cambiar las costumbres agropecuarias.
La unión hace la fuerza
Los labriegos producen artesanalmente alimentos para animales y biofertilizantes que son comercializados localmente, allí es utilizado como materia prima en los cultivos de la zona, aprovechando incluso subproductos agrícolas que normalmente son descartados.
La asesora de la dirección general para Alianzas Estratégicas con el sector privado de la ARN, Laura Cuellar, acompaña la gira por la Red de Paz del Catatumbo. “Es una apuesta que ha venido liderando Paso Colombia con distintas formas asociativas de firmantes de paz, comunidades campesinas y otros actores estratégicos en el territorio, como la Misión de Verificación y la Universidad Francisco de Paula Santander”, dice.
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“Las comunidades enfrentan los altos costos de los concentrados para los animales, por esta razón es muy interesante ver cómo en las biofábricas se produce y se logra venderlo a menor precio para los asociados de las cooperativas, pero también entrar a suplir la demanda de una manera equitativa. Entonces, es una red pensada en lo colectivo con las otras cooperativas que están en el territorio”, recalca.
Transformación de las costumbres
El representante de la Cooperativa Multiactiva de Reincorporación y Paz de Teorama, Gerson Cáceres Soto, al comentar que se trabaja con forrajeras o rastrojo como botón de oro, matarratón, morelia y yátago “nunca nos imaginábamos que servía para hacer concentrado para cerdos de engorde, lactancia, ganado con doble propósito leche y carne, peces, gallinas y pollos”.
“Con el favor de Dios se avanza en el proceso de paz y esperamos conquistar nuevos mercados. Es una alternativa para que se acabe los cultivos ilícitos en el Catatumbo con la sustitución”, precisa.
Comprometidos con la paz
Para John Orozco, gerente de la Cooperativa Multiactiva de El Tarra, esta ha sido una gran oportunidad de vida, tras la firma del acuerdo final y la dejación de las armas, han trabajado articuladamente con las comunidades en estos proyectos.
“Entonces ya se ha llegado a acuerdos con algunas comunidades de que se vuelvan productores de yuca, de maíz, que las cooperativas hacen un compromiso con estas comunidades para comprarles la materia prima y poder tener una producción estable. Entonces, si compramos la materia prima del campesino, lo estamos y motivando”, recuerda Orozco.
Experiencias significativas
En aras de la reconciliación y el perdón los reincorporados siembran la semilla de la convivencia a través de los proyectos alternativos.
“Ya completamos tres biofábricas en la red. La primera fue la de AGROINCAT en Tibú, en esta gira PASO Colombia entregó maquinaria a COODEPAZC en San Calixto, a COOMTARPAZ en El Tarra y la UFPS nos ayudó a certificar a 80 de los integrantes de las formas asociativas que veníamos capacitando en la elaboración de alimentos concentrados”, manifiesta Sandra Durán, representante legal de AGROINCAT y extensionista de PASO Colombia
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En Norte de Santander existen 464 proyectos colectivos e individuales aprobados que benefician a 586 personas. 461 proyectos individuales aprobados, beneficiando a 536 personas. 3 proyectos colectivos aprobados, que benefician a 50 personas.
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