En el reciente informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), Cúcuta sorprendió, porque la inflación anual en enero cayó 7,53 puntos porcentuales (p.p.), respecto a 2023.
El indicador pasó de 15,91% a 8,38% (2024) y la urbe se ubicó en el noveno lugar de la tabla de 23 ciudades. Además, fue la quinta con menos variación mensual en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), al registrar 0,69%.
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El subdirector del DANE, Leonardo Trujillo, indicó a La Opinión que la inflación del mes pasado, en la capital de Norte de Santander, fue jalonada por aumentos en los combustibles, específicamente en la gasolina, que tuvo un alza de $600 en el galón; en los almuerzos y en las comidas preparadas fuera del hogar, con contribuciones de 0,19 p.p., 0,18 p.p. y 0,10 p.p.
“Los huevos restaron 0,09 puntos porcentuales a la variación mensual total de la ciudad. La variación en enero de los alimentos fue de -0,71%, explicado por la disminución de los huevos y el plátano, que restó 0,08 puntos”, agregó Trujillo.
¿Se percibe la baja?
Pese a la caída del IPC anual, la opinión pública no percibe el alivio en su bolsillo, ¿por qué?
El economista Alexander Botello, investigador y docente universitario, indicó que la reducción de la inflación objetiva no va acompañada inmediatamente de una reducción de la percepción por parte de los ciudadanos, aunque el resultado del informe del DANE evidencia la desaceleración desde 2023, en especial, en los alimentos.
“Hay rubros que presionan al alza y que inciden en la percepción, por ejemplo, el transporte, en particular el precio de los combustibles, siendo la segunda ciudad con la mayor variación del mes. De igual forma, los rubros recreación y cultura, como también hoteles y restaurantes”, añadió.
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El economista aseguró que, en años anteriores, los alimentos fueron los que presionaron al alza. Sin embargo, ahora, estos muestran señales de normalización y alivian un poco el bolsillo de los cucuteños.
“Pero como el IPC agrupa diferentes divisiones de gasto, otros rubros, por el contrario, aumentan. Y más teniendo en cuenta que, por ejemplo, el sector de la educación toma mayor protagonismo en febrero, en los cálculos del IPC”, destacó el investigador.
Variaciones en Cúcuta
- Restaurantes y hoteles: 2,72%
- Transporte: 2,06%
- Bebidas alcohólicas: 1,17%
- Arriendo y servicios públicos: 0,72%
- Ropa y calzado: 0,43%
- Recreación y cultura: 0,37%.
- Alimentos y bebidas no alcohólicas: -0,71%
Alza en febrero en educación
El subdirector del DANE, Leonardo Trujillo, sostuvo que siempre se espera en enero un promedio de 0,90% en la variación del IPC, pero en febrero es más alta, por el pago de matrícula escolar, el inicio del año académico y los gastos en útiles.
El economista de BBVA Research, Laura Katherine Peña, expresó que la inflación anual en alimentos se ubicó en 2,96%, descendiendo 205 puntos básicos frente al dato de cierre del 2023, el más bajo desde febrero de 2019.
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Señaló que se espera que los precios presenten reducciones durante los siguientes meses. Sin embargo, se mantendrán presiones importantes asociadas a factores de indexación.
“Las reducciones seguirán favorecidas en el primer trimestre por efectos base, aunque las variaciones mensuales se pueden mantener por encima del promedio”, resaltó Peña.
El economista principal de Scotiabank Colpatria, Sergio Olarte, también consideró que la inflación va a continuar en caída y en febrero se verá por debajo del 8%.
Añadió que se espera que el Banco de la República logre aumentar su velocidad de bajada de tasas de interés hacia 3/4 de un punto porcentual, para su reunión de marzo y fijar la tasa en 12%.
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