Cada año, una vez entrado diciembre, comienzan a revivir las tradiciones que caracterizan a Colombia y la diferencian de otros países, en especial cuando se trata de su gastronomía única y famosa por su variedad en comidas típicas que han acompañado a sus habitantes durante toda su historia.
Algunas de las preparaciones que se realizan para la temporada decembrina, se ven cada vez más impactadas por el alza de los precios que han tenido los alimentos a lo largo de los años, sobre todo por la fuerte demanda que se genera durante este último mes, agregado a la inflación.
Según Wilman Tarazona, Presidente de la Asociación de Supermercados Independientes de Norte de Santander, en comparación con el año pasado, los precios durante esta temporada podrían alcanzar un incremento de hasta el 25% dependiendo del alimento y su demanda para las cenas navideñas.
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Las proteínas, como el cerdo, la carne de res y el pollo, son, por excelencia, los ingredientes base más usados en los platos, lo cual los convierte en el producto que más sube. Hasta el momento, tal como lo explica Tarazona, han mostrado un aumento del 5% para el cerdo, 3% las reses, y 7% las carnes blancas, sin alcanzar aún su pico más alto, que se vendría presentando para la segunda quincena de este mes.
“El problema es que las cantidades para la venta en este mes siguen siendo las mismas, pero las cantidades que compran las personas es demasiado alta y eso hace que crezcan los precios, la alta demanda de carnes y verduras, mientras que otros productos, como los huevos, bajan de precio debido al cierre de las escuelas por vacaciones y demás motivos” agregó.
Comidas típicas que se preparan en cantidad y entre las cuales están la lechona, el capón, la hayaca y el sancocho, serán las cenas más valoradas de esta década debido a los altos costos que tendrán sus ingredientes, donde las verduras como los guisantes, el pimentón, las mazorcas, papa, cebolla, zanahoria y ajo, por nombrar algunos, se dispararán debido a que la oferta sigue siendo la misma, pero la demanda crece.
Con el pasar del tiempo, se ha hecho común que algunas familias prefieran comprar sus cenas navideñas ya preparadas debido a los costos de elaboración, creando un mercado donde quienes se dedican a recibir estos pedidos producen los platos en cantidad para así lograr dejar una ganancia significativa.
Sin embargo, debido a la subida en los alimentos, la ganancia se disminuye cada vez más y con el fin de no tener pérdidas y proteger los ingresos, los pedidos cada vez deben ser más grandes para sostener los precios por porción.
Cocinar una hayaca cucuteña, estaría costando alrededor de $4.500 para posteriormente ser vendida en $8.000, dependiendo de la cantidad solicitada, pues como señala Katherine Galvis, dueña de la tienda de comestibles Bocaditos, la cual se dedica a la venta de pasabocas y menús para fiestas particulares y decembrinas, ningún producto realizado en una cantidad inferior a diez, es viable, pues no genera más del gasto de la misma producción.
Esta modalidad de consumo, permite que sea más accesible agregar más de una proteína a un plato por porción y contribuye a mantener las costumbres, aunque ya sea por motivos económicos o de disponibilidad de tiempo, no puedan realizarse de forma tradicional en cada uno de los hogares.
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Adquirir un menú simple para un total de diez personas, que contenga hayaca, ensalada rusa y pan navideño, costaría, según Katherine en Bocaditos, 160.000 pesos, mientras que uno más elaborado con dos proteínas, que pueden ser pechuga rellena y lomo de cerdo, acompañadas de arroz navideño y ensalada blanca, para la misma cantidad de personas, estaría en $250.000, lo cual es casi el mismo valor que costaría realizarlas en casa.
“Es un ganar, ganar, preparar las cenas, lleva mucho trabajo y tiempo y preparadas el menudeo, para por ejemplo una casa de familia es más costoso, que para nosotros que realizamos en cantidad. Ellos compran por un precio similar al que pagarían realizando las comidas ellos mismos, gastando tiempo y servicios y nosotros obtenemos una ganancia significativa al realizarlo al por mayor”, mencionó Katherine.
Pero este mercado no solo se limita a quienes han decidido dedicarse de lleno, pues grandes supermercados de cadena han incluido dentro de su catálogo de venta algunos productos empaquetados o de fácil preparación que ayudan a las familias a mantener sus tradiciones en sus mesas cada navidad.
En una de las cadenas de supermercados más reconocidas a nivel nacional, es posible comprar los platos preparados y listos para llevar a la mesa, con un tiempo de entrega de tres a catorce días hábiles y un precio de $87.200 por cuatro porciones este incluye: 150 gramos de pernil de cerdo, 150 gramos de arroz de coco y 150 gramos de ensalada de papa, más 40 gramos de salsa de ciruelas junto a 20 gramos de salsa derivada de hierbas.
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En comparación, al hablar de precios, es más económico encargar estos productos a vendedores locales que preparan en cantidad para las fechas, pero lo que sí es cierto es que la facilidad que ofrece este tipo de supermercados en un apuro, equivale al precio de sus productos.
Hasta el momento, como recalca Tarazona, los precios no han alcanzado su tope y se recomienda realizar compras desde ahora, puesto que algunos productos podrían subir hasta el 50% en su valor, más con la llegada de los aguinaldos, que suponen una fecha de consumo masivo.