Cúcuta fue escenario, ayer, del primero de ocho encuentros organizados por la Comisión Legal de Paz de la Cámara de Representantes, con el fin de recoger las propuestas que tienen los colombianos para construir la paz en los territorios.
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‘Pensemos a Colombia en Paz’, es la iniciativa que congregó a empresarios, sectores sociales, campesinos, mujeres, jóvenes, representantes de la academia y la dirigencia política de Norte de Santander, quienes coincidieron en la urgencia de desescalar el conflicto en la región del Catatumbo, tras cinco meses de una intensa confrontación que ha dejado al menos 135 muertos y cerca de 70.000 desplazados.
Diógenes Quintero, presidente de la Comisión de Paz de la Cámara, explicó que es precisamente la situación que vive esta zona del país la que motivó la necesidad de comenzar esta serie de encuentros regionales en el departamento y lograr que todos esos llamados que hay desde el territorio puedan ser escuchados a nivel nacional.
“El día que haya paz en el Catatumbo y en Norte de Santander, hay paz en Colombia. Hoy nos sentimos solos y si definitivamente así es que nos van a dejar, tenemos que seguir y unirnos como región para exigirle con más contundencia al Gobierno”, manifestó el dirigente político.
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Durante su intervención, el alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, se refirió a la compleja situación de violencia e inseguridad que vive la ciudad en los últimos meses y dijo que si bien desde la administración no se ha bajado la guardia para hacerle frente a este problema, hay “dinámicas violentas que superan lo local”.
“Lo que vivimos no es un fenómeno aislado, es parte de un escenario que demanda unidad, recursos, inteligencia y, sobre todo, voluntad política. Por eso, más que señalar responsables, vengo a reiterar la disposición de Cúcuta para trabajar articuladamente con todas las instancias del Estado, pero también vengo a pedir que los territorios como el nuestro no sigan enfrentando solos una problemática de escala nacional”, manifestó.

Por su parte, el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar Laguado, hizo un repaso por las iniciativas de paz que se han impulsado en la región y dijo que si hay algo que le conviene al departamento es “una frontera abierta y un Catatumbo en paz”.
“Soñamos una región que pueda tener una buena relación con Venezuela, que haya la posibilidad de que nuestros empresarios tengan un mercado, y soñamos una región en donde no estén los actores armados, porque el Catatumbo es el 40% del área del departamento, pero además, por sus condiciones, permite ser una gran despensa agrícola no solo para Norte de Santander, sino para Colombia”, planteó el mandatario.
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En representación de la comunidad motilón barí, Judith Asoyra, también aprovechó el escenario para hacer un llamado a no dejar solo a este pueblo indígena en medio de las acciones violentas que se viven en su territorio y garantizar el retorno de las comunidades desplazadas.
Entre tanto, la Asociación Campesina del Catatumbo insistió en la necesidad de avanzar en un acuerdo humanitario ante la grave crisis humanitaria que se libra en esa subregión.
Estos encuentros cuentan con el acompañamiento de la Universidad Sergio Arboleda y también se desarrollarán en Chocó, Caquetá, Cauca, Córdoba, Magdalena, Putumayo y Valle del Cauca. Los insumos que de allí salgan serán presentados al final en un evento en Bogotá, donde la Comisión le contará al país cuál es la ruta que proponen desde las regiones para transitar hacia la paz “y no resignarnos a la guerra”, según explicó Diógenes Quintero.
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