Con controles a establecimientos comerciales, identificación y patrullajes en los sectores urbanos de Pamplona, la Policía impuso el fin de semana 12 órdenes de comparendos por comportamientos contrarios a la convivencia ciudadana.
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En el balance se destaca el cierre de un establecimiento comercial por permitir la presencia de menores de edad después de las 10:00 de la noche.
En Pamplona, a raíz de los hechos violentos ocurridos en septiembre, así como por las venta y consumo de estupefacientes, la alcaldía decretó el toque de queda para menores de 18 años.
De esta manera quedó prohibida la permanencia o circulación en las vías, parques y negocios desde la 10:00 de la noche hasta las 6:00 de la mañana del día siguiente.
El comandante de la Estación de Pamplona, capitán Klerman Toscano Medina manifestó que en los controles también se incautaron seis armas blancas.
“Estos planes de disuasión se intensifican con el fin de garantizar la seguridad y prevenir la movilización de todo tipo de armas y los hurtos a personas mediante la modalidad de atraco”, dijo Toscano.
El oficial agregó que hacen presencia con unidades del Batallón García Rovira en los barrios Simón Bolívar, Cristo Rey, Juan XXIII, Jurado, El Olivo, Brisas de Pamplonita, Los Cambuches, Santa Marta, sector Puente Angosto y Plazuela Almeyda, entre otros puntos del municipio.
El capitán añadió que en desarrollo de las actividades solicitaron 289 antecedentes a personas, 234 a vehículos y 18 revisiones de números de identificaciones de celulares, 65 planes preventivos y 8 campañas educativas.
Más adelante aseguró que las intervenciones tienen la finalidad de prevenir la violencia intrafamiliar, el consumo de estupefacientes, lesiones personales y el homicidio en la jurisdicción.
Para hacer efectivo y en tiempo real los procedimientos, cada agente hace las consultas de antecedentes a través del Sistema Integrado para Auto Center (Sinac), que permite las capturas por orden judicial y recuperación de automotores hurtados.
Mucho cuidado
El capitán Toscano Medina dijo que las unidades adscritas al modelo nacional de vigilancia comunitaria por cuadrantes lograron retirar de un cajero automático de la zona bancaria una lámina negra con adhesivo que tenía la finalidad de retener el dinero que los usuarios fueran a retirar y de esta manera hurtarlo.
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El oficial agregó que las acciones hacen parte de las medidas de seguridad que la Policía empezó a implementar con motivo de la llegada de la temporada de fin de año.
“Lo que buscamos con nuestros planes institucionales es que la ciudadanía se sienta segura y que también nos colabore denunciando cuando noten movimientos de personas extrañas”, expresó.
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