Las familias de José Antonio Morales y de Johan Stiven Torres, ambos de 14 años, quienes habían desaparecido desde el sábado 3 de septiembre, dejaron de sufrir, luego de reencontrarse con los pequeños.
Según se conoció, los dos menores de edad aparecieron en Ocaña y se encuentran bien de salud.
Precisamente, por esta vía habían sido vistos los dos amigos que, al parecer, emprendieron el viaje hacia Aguachica (Cesar), engañados con una oferta de trabajo.
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Su desaparición
Una conversación en el celular de uno de los menores, fue lo que alertó a los seres queridos de las intenciones de los dos niños, por lo que de inmediato acuedieron a las autoridades.
La madre de José Morales recordó que el sábado su hijo le aseguró que iría a pasar la tarde en piscina con su amigo Johan Stiven, como acostumbraba a hacerlo, por lo que ella accedió a darle permiso. “Yo considero que Johan es una buena amistad de él y no vi nada raro, por eso lo dejé ir”, dijo la mamá del menor.
Sin embargo, horas después, José Antonio le envió una nota de voz a través de WhatsApp, en la que le aseguraba que ellos se habían ido hacia Bogotá.
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