El terror y la zozobra se sintieron ayer en el Anillo Vial Oriental, cerca de la urbanización Torres de Bolívar, cuando un explosivo, detonado de manera remota, estalló en el momento que una motocicleta de la Policía Metropolitana de Cúcuta escoltaba a un camión de la institución.

La explosión, que fue escuchada en varios puntos de la capital nortesantandereana, especialmente en la ciudadela Juan Atalaya, lanzó por el aire a un subintendente y un patrullero, adscritos a la Unidad Nacional de Intervención Policial y Antiterrorismo (Unipol), quienes iban en la moto. 

 “Yo los estaba viendo transitar en sentido contrario (a los policías), cuando hubo una explosión muy fuerte a un costado de la vía y salieron a volar los dos policías. Eso fue tremendo, de inmediato frené mi vehículo (tractomula), y esperé a ver que iban a hacer. A los pocos minutos una patrulla auxilió a los dos heridos y se los llevaron”, dijo un conductor que alcanzó a ser testigo.

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La comunidad de la urbanización, asustada, tuvo que refugiarse en uno de los parqueaderos, pues debido a la onda expansiva, decenas de ventanas terminaron rotas. Pocos minutos después, cuando ya las autoridades acordonaron el lugar, muchos de ellos aseguraron sentir mucho temor por la cercanía de la estación de Policía, pues en las últimas semanas, han ocurrido por lo menos 8 atentados terroristas con explosivos en las instalaciones policiales.

“Ya nos da miedo tener esa estación tan cerca. Esta situación de orden público aquí en Cúcuta se está saliendo de control, uno entiende la atención que se está dando al Catatumbo, pero acá también necesitamos a la Fuerza Pública (…) nos estamos acostumbrando a las explosiones y eso no está bien”, dijo una de las residentes con frustración.

Según  el coronel Julio Olaya, comandante Operativo de la Mecuc, los dos uniformados se recuperan satisfactoriamente. Ambos sufrieron lesiones en sus piernas.

Hay sospechosos

Durante más de hora y media, ese punto de la arteria vial estuvo acordonada y su paso restringido mientras varios uniformados de la Unidad Antiexplosivos de la Seccional de Inteligencia (Sijín) de la Policía revisaban con herramientas especiales y caninos el lugar y sus alrededores para verificar que no existiera otro artefacto cerca.

De manera extraoficial, este medio conoció que por ahora serían tres los presuntos responsables de activar el artefacto explosivo y por cómo funcionaba el sistema de activación, se presume que serían integrantes de las milicias urbanas del Ejército de Liberación Nacional (Eln).

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“Al igual que en los atentados de Villa del Rosario, la activación fueron por medio de radiofrecuencias y de acuerdo a los resultados de las primeras investigaciones, se establecerían que, al momento de pasar la patrulla de Policía, tres hombres estarían observando desde las zonas baldías”, explicó una fuente judicial.

Así mismo, pese al fuerte impacto y su onda expansiva en la urbanización, se presume que la carga que detonó no sería tan grande como las que se utilizaron el pasado 20 de febrero en varios puntos importantes del Municipio Histórico y que destruyeron el peaje de La Parada y el CAI Villa Antigua.

Por ahora, las autoridades recopilan los videos de las cámaras de seguridad cercanos para dar con la identificación de las personas que instalaron el artefacto. Ningún residente de la urbanización resultó lesionado por los vidrios provenientes de las ventanas que estallaron.

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