Lo que empezó como un aparente allanamiento de un grupo de policías en la casa de un hombre con detención domiciliaria por porte ilegal de armas, terminó siendo un plan para exigir el pago de una extorsión.

De esto tuvieron conocimiento las unidades de la Dijín a mediados de 2020 y por eso iniciaron una investigación, logrando conocer que los uniformados en ese entonces estaban adscritos a la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).

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Los investigadores constataron que dicha diligencia judicial no fue ordenada por un fiscal y mucho menos se adelantaba alguna investigación que permitiera cumplir con el allanamiento.

Ante eso, los investigadores de la Dijín siguieron adelante con las pesquisas, y así lograron establecer que quienes participaron en el allanamiento vestían los uniformes de la Policía y otros que estaban de civil tenían puestas unas chaquetas de la Sijín.

La mayor sorpresa que tuvieron los investigadores fue que dos de los uniformados que llegaron en una moto de la Policía eran los de un cuadrante de la ciudadela La Libertad, mientras que los otros se movilizaban en un carro particular, aparentando ser integrantes de la Sijín.

Lo que querían

“Luego de hacer el supuesto allanamiento, por más de media hora, los policías le dijeron al hombre que estaba con detención domiciliaria que se lo iban a llevar, porque tenían una orden de captura en su contra, pero que si no quería eso, les debía colaborar, pagándoles 5 millones de pesos”, comentó una fuente extraoficial.

Cuando se encontraban en eso, la mamá del hombre al que le exigían el dinero, apareció, y al enterarse de lo que estaba pasando, les habría indicado a los uniformados que ella no tenía todo ese dinero.

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“Los policías se habrían bajado a 4 millones de pesos y la mujer les dijo que listo, pero que le dieran tiempo para buscar el dinero, por eso les pidió que volvieran más tarde, pues debía ir a empeñar el carro”, señaló la fuente.

Finalmente, la mujer logró conseguir $1,5 millones, y supuestamente le entregó el dinero a los policías que iban en la moto del cuadrante.

Los denunció

Horas después de lo sucedido, la mujer decidió denunciar y fue ahí cuando los ‘sabuesos’ de la Dijín iniciaron la investigación.

Luego de tres años de indagar y recopilar el material probatorio suficiente, la Fiscalía logró que un juez avalara la orden de captura contra los cuatro hombres que habrían participado en el hecho.

Unas de las pruebas que habrían logrado conseguir los investigadores es que alguien cercano de la víctima grabó y tomó fotos del hecho.

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La captura

Hace dos días, cuando tuvieron las órdenes de captura en sus manos, los funcionarios de la Dijín decidieron ir a detener a los cuatro presuntos implicados en este caso.

Se conoció que dos de los capturados aún siguen siendo miembros activos de la Policía, mientras que los otros dos ya están retirados de la institución.

Ayer, al cierre de esta edición, un juez les definía su situación jurídica, por eso no se logró conocer sus identidades.

Algunas fuentes judiciales señalaron que esta modalidad de extorsión es muy usada por miembros corruptos de la Policía, por eso invitaron a denunciarlos ante la Fiscalía o la Seccional de Inteligencia, que tiene un grupo especializado.
 

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