La UEFA no quiere una Eurocopa sin público, y ajustará de aquí a finales del mes de abril el plan inicial, que prevé doce ciudades organizadores en doce países, si algunas no pueden recibir espectadores, anunció la instancia este miércoles.
"Si una ciudad llegara a proponer un escenario a puerta cerrada", los partidos que debían disputarse allí "podrían" ser transferidos "a otras ciudades que tengan la capacidad de albergar espectadores", indicó la UEFA.
El domingo, el presidente de la UEFA, el esloveno Aleksander Ceferin, había afirmado al diario croata Sportske Novosti que los partidos de la Eurocopa (11 de junio-11 de julio), ya aplazados un año debido a la pandemia, no serían "disputados ante tribunas vacías".
"Todos los organizadores deberán garantizar la presencia de aficionados", había insistido el dirigente, cuando la instancia se planteaba hasta cuatro opciones por cada ciudad: estadio lleno, 50 a 100% de espectadores, de 20 a 30%, o a puerta cerrada.
Cuando la propagación de variantes del covid-19 impide toda relajación en cuanto a precauciones sanitarias en Europa, tal exigencia podría implicar un reagrupamiento del torneo en "diez u once países" más que doce, según el patrón de la UEFA.
La instancia europea dio hasta el 7 de abril a cada ciudad para decidir su opción, y piensa tomar una decisión "como muy tarde" en su comité ejecutivo el 19 de abril, la víspera de su congreso anual previsto en Montreux.
Ya complicada desde un punto de vista logístico, esta Eurocopa paneuropea suscita dudas desde hace meses debido a las restricciones de desplazamiento, variables de un país a otro, dejando a delegaciones y aficionados ante lo desconocido.
Pero este formato "es también una suerte", ya que "si no se puede hacer nada en un país, quedan otros once en los que los preparativos ya están en curso", argumentaba a mediados de marzo el médico Daniel Koch, antiguo "Míster Covid" de Suiza, convertido en consejero sanitario de la UEFA.